12 de mayo: Día del Fonoaudiólogo

La Fonoaudiología nace en nuestro país como una disciplina auxiliar de la medicina enraizada en la Otorrinolaringología. La fonoaudiología argentina constituye un movimiento académico científico pragmático con características propias, siendo el primer país que coordina las tres áreas que identifican la carrera: voz, audición y lenguaje. La Fonoaudiología ha llegado en estos últimos años a su madurez al constituirse en una disciplina que avanza con la misma celeridad que otras ciencias y técnicas de investigación y rehabilitación.

Es una especialidad dentro del ámbito de la medicina que se ocupa del diagnostico y tratamiento de los trastornos de la voz, lenguaje y audición, respiración y deglución en pacientes de todas las edades.

La labor del fonoaudiólogo es indispensable para realizar la prevención, diagnostico y tratamiento en las aéreas antes mencionadas.

Actualmente en la Argentina se puede cursar la carrera egresando como fonoaudióloga/o, licenciada/o y doctor/a.

La inclusión del fonoaudiólogo en un equipo interdisciplinario en salud como en los Gabinetes Psicopedagógico es de fundamental importancia para la población permitiendo prevenir, detectar posibles dificultades.

Saludo

Desde el Colegio de Fonoaudiólogos de Santiago del Estero queremos saludar a todos los profesionales de la Fonoaudiología en su día:

Ser fonoaudiólogo es enseñar a decir, pero no es un decir solamente con palabras; es un decir con todo el cuerpo y todo el corazón.

Por que a cada sonido se le da un sentido.

Ser fonoaudiólogo es ponerle vida a las palabras,

Es comunicarse, es comunicarnos.

Es compartir el mismo código a través del mismo canal o de otros canales,

Ser fonoaudiólogo es un sentido de vida, es una pasión; una forma de estar y ser en el mundo con y para el otro.

Ser fonoaudiólogo es sentir el vínculo, la interrelación, mirarse, conectarse.

Es emocionarnos ante la primera palabra que escuchamos; ante un primer contacto visual, ante la primera sonrisa acompañada de un gesto; ante el asombro que indica el tan ansiado “escucho”.

Ser fonoaudiólogo indica que a ningún estimulo se le hace oídos sordos.

Ser fonoaudiólogo es acompañar en el proceso de aprender y re aprender aquello que quizás hoy podemos hacer un poco diferente.

Ser fonoaudiólogo es más que la lengua, la boca o el oído.

Es ni más ni menos que fluir en la vida de manera continuada y sin tensiones, es dosificar nuestro aire para llenar nuestro cuerpo de alegría.

Es sentir a pleno nuestras emociones más bellas y hacerlas resonar en nuestro entorno. Es guiar a cada uno a la reflexión de comunicarse y expresarse con naturalidad, Porque siendo fonoaudiólogos siempre tenemos mucho más para decir.