Mons. Bokalic: "Mama Antula tiene que renovar nuestra Iglesia y comunidades Mons. Bokalic: "Mama Antula tiene que renovar nuestra Iglesia y comunidades
En la capilla del Seminario Diocesano Santiago, el Mayor se entronizó anoche la imagen de la beata María Antonia de San José. La celebración eucarística fue presidida por el obispo diocesano, monseñor Vicente Bokalic, quien estuvo acompañado por el rector del seminario, Pbro. Julián María Cueva, seminaristas y familiares. En su mensaje a la comunidad, el prelado instó a "dar gracias a Dios" por la beatificación de Mama Antula, quien "es una maestra de vida, que la podemos vivir hoy en día".
En el marco de las actividades en honor a la beata santiagueña, la figura de Mama Antula fue colocada en la capilla de esta sede eclesial, a la que honrarán especialmente los seminaristas.
"Esta mujer que hoy ya la consideramos y tenemos como beata se dejó enseñar por Jesús. Esta mujer que hemos descubierto y que tenemos que seguir descubriendo, tiene que acompañarnos de aquí hacia adelante. Decíamos que la beatificación no es un punto de llegada, sino un comienzo de algo nuevo, de una gracia muy especial para todos como pueblo de Dios. En estos días que nos hemos llenado de alegría, fuerza, entusiasmo, que sentimos y hemos palpado la presencia del Señor en nuestras vidas y comunidades", dijo el obispo diocesano.
Recalcó también que "esto es un poco el camino que ha tomado esta mujer peregrina, que escuchó a Jesús. Sus padres espirituales, los jesuitas, le introdujeron seguramente esa metodología de los ejercicios. Uno de los temas es el encuentro de la palabra de Dios".
"María Antonia se compenetró de alguna manera de los sentimientos de Jesús, encarnó la palabra de Jesús y eso es lo que la llevó a salir a caminar. Celebramos a alguien que escucho mucho a Jesús en su vida y esto es una enseñanza para nosotros. Jesús se dedicaba mucho tiempo a enseñar. Jesús era la palabra encarnada, de vida, no eran palabras vanas, sino que tenían poder en el corazón de la gente. Traía la palabra que crea, que da vida, que levanta el espíritu, da sentido a toda vida. Nosotros como Mama Antula tenemos que sentar la actitud de escucha para aprender y enseñar con la palabra de Dios", exhortó Bokalic.
Mujer ejemplo
En esta nueva etapa que vive la Iglesia Católica de Santiago del Estero y de todo el país, camino hacia la canonización de la laica santiagueña, Bokalic destacó una vez, que María Antonia era "una mujer que dejó todo por sus afectos y su familia, eligió la pobreza, se sacó el apellido que tenía para que no tenga señales de poder, quiso hacerse pequeña. Solamente con esa cruz, descalza, comenzó a caminar y enseñar, a traer a Jesús. Qué pocas cosas para hacer la gran obra que hizo, porque se puso en las manos de Dios".
"Ella era consciente que esa obra no era de ella, lo fue descubriendo cada vez más. Ella reunía cientos de personas, que cambiaba sus vidas en los ejercicios. No se le subió los humos a la cabeza, sabía que ella era simplemente aquella lanzaba a correr para que el Señor haga la obra", añadió.
Más adelante el prelado rescató que "este tipo de santos están anclado en el Señor, pero no lejos a la gente, ni de los pobres, de los sencillos. Por eso siente la orfandad de la gente y sirvió a los esclavos y otra gente que andaba en caminos raros, en vicios, y eso le tocó el corazón".
En su mensaje a la comunidad, Bokalic puso énfasis en que "debemos dar gracias a Dios por esto, es una maestra de vida, que la podemos vivir hoy en día. Cuando la conocemos a ella, no hay que hacer grandes cosas para vivir el Evangelio de vida. Al santo lo tenemos que admirar, conocer. A Mama Antula no hace falta hacerle cosas raras para hacer lo que ella ha hecho".
Por último, el obispo de Santiago remarcó que debemos "Mama Antula nos tiene que renovar nuestro camino, nuestra Iglesia, comunidades con este espíritu, de buscar y caminar muy cerca de aquellos que necesitan la luz y la palabra y, por supuesto, que el Señor nos regale sacerdotes para nuestra diócesis, que nos acompañe en un mundo laical".