Rita Pérez, la protectora de los desamparados del barrio Bosco III Rita Pérez, la protectora de los desamparados del barrio Bosco III
Ahora Rita dio vida a la Asociación Unidos por un Sueño, en el barrio Bosco III, donde además del apoyo y la contención a los jóvenes, esta madre de 35 años también alberga en su casa a cinco adolescentes y niños que sufren las consecuencias de la drogadicción, y asegura que jamás le soltará las manos a ninguna persona que necesite de su ayuda.
Hoy, a horas de levantar las copas para brindar por el Nacimiento del Niño Jesús, Rita, el ángel de la guarda de más de 30 chicos y jóvenes de la comunidad, rememoró cada una de las experiencias vividas con sus protegidos (de las buenas y de las otras) y adelantó que pedirá por el bienestar y la no discriminación a los jóvenes.
“Hace cuatro años que vivo y respiro por estos chicos que me necesitan. Hoy voy a brindar por ellos, porque aprendieron a valorarse y supieron decirle sí a la vida en medio de tantos problemas que los aquejaba. Este año fue diferente porque 21 chicos del grupo ingresaron a la escuela primaria y eso me hace muy feliz. El regalo de Navidad que recibí por parte de ellos fueron los certificados. Hoy abrazaré a los chicos y los motivaré a seguir luchando por su propio bienestar”, reflexionó la protectora de los necesitados.
Rita se vio motivada a realizar esta obra de caridad, luego de que el flagelo de la droga le quitara lo que más amaba en el mundo: su hijo del corazón Marcelo. Desde entonces decidió convertir ese inmenso dolor en ayuda al prójimo.
Ahora, además de sus colaboraciones, sus planes se amplían día a día, y es así como está brindando clases de apoyo y de dibujo a los niños del barrio. También es el refugio de quienes no tienen en donde dormir.
Ella está convencida de que de esta forma logrará que esos pequeños terminen sus estudios y puedan tener, cuando sean adultos, un trabajo que los dignifique como personas.
