El médico, el psicoanálisis, el teatro y sus ganas intensas de vivir El médico, el psicoanálisis, el teatro y sus ganas intensas de vivir
¿Las ganas de vivir, sus convicciones o parte del psicoanálisis lo mantienen de pie?
Son una mezcla de mis convicciones y el trabajo que he hecho a lo largo de mi vida para tratar de mejorar, con la idea de que uno puede ser mejor. Yo pienso yo soy así, pero a lo mejor puedo ser mejor si me dejo ayudar.
¿Se deja ayudar? ¿Cómo se cuida?
Yo tengo un médico que es mi amigo personal. Voy a verlo todas las semanas. Es un médico que trabaja no en la curación sino en la prevención de la enfermedad. Ese es el secreto.
Me pongo unas inyecciones. Esto me mantiene con cierta vigencia a una edad ya avanzada. La Argentina es un país muy bien mirado a nivel mundial por su vasta producción teatral.
La Argentina está produciendo una enorme cantidad de obras que ha llamado la atención en el mundo. En Europa, en Medio Oriente y en Latinoamérica llama la atención por la vasta producción de obras teatrales en sus más diversas formas y conceptos. Solamente en Buenos Aires, que es donde vivo y normalmente me expreso acá, tenemos 230 salas, más pequeñas o más grandes. Son 900 espectáculos por mes. La situación económica no da para trabajar de martes a domingo o de miércoles a domingo y entonces las compañías trabajan un día a la semana. Hay teatros que hacen tres espectáculos diferentes en el día.
¿Qué le genera a usted, como actor enamorado de su trabajo, esta producción en su país?
Es muy importante y me hace sentir orgulloso porque una de las cosas que tiene un país, básicamente de gran inmigración como la Argentina, va conformando una manera unitaria de ser y eso nos puede llegar a proyectar un lugar en el mundo mejor del que tenemos.