Promesa de pago en Ersa, pero el conflicto de fondo sigue sin solución Promesa de pago en Ersa, pero el conflicto de fondo sigue sin solución
Tras una caótica jornada en la que más de 70 mil vecinos de la capital quedaron sin servicio de transporte público por el paro en Ersa, anoche los choferes y UTA acordaron levantar la medida de fuerza. Ello, luego de que la empresa diera marcha atrás en su intransigencia de que no podía pagar el aumento del 5,7% del sueldo de octubre, y ofreciera abonarlo la próxima semana.
De ese modo, hoy en el primer turno comenzarían a circular normalmente los coches de las seis líneas (110, 112, 114, 116, 119 y 120) que concesiona la firma. Sin embargo, algunos colectiveros mantenían la postura de continuar con el paro hasta que se efectivice el pago. Es que recordaron que el mes pasado se dio la misma situación (el no pago del aumento) y que Ersa se comprometió a pagarlo y lo hizo a medias, desatando un nuevo conflicto.
Mientras tanto, los usuarios se vieron perjudicados por la falta de servicio, por lo que tuvieron que buscar otros medios para llegar a sus trabajos, llevar los hijos a las escuelas o hacer otros trámites.
Gestiones
Por la mañana, la Secretaría de Trabajo dictó la conciliación obligatoria, pero no fue acatada por los choferes, quienes señalaron que no había razón para levantar la medida, porque no tenían ningún ofrecimiento por parte de Ersa.
Tras un cuarto intermedio, a las 18, las partes: Ersa, choferes, UTA, Municipalidad de la Capital representada por el fiscal Martín Ramos; y el subsecretario de Trabajo, Walter Aseffh, volvieron a sentarse. Sin embargo, ante la falta de una propuesta, UTA y los choferes salieron de la reunión anunciando que el paro convocado por tiempo indeterminado se mantenía.
Fue entonces que los dirigentes de UTA recibieron una comunicación de la Secretaría de Interior del sindicato de choferes de colectivos, quienes informaron que hicieron gestiones ante el presidente de Ersa y titular de la Federación Argentina del Transporte Automotor de Pasajeros, Juan Carlos Romero, para que abone la diferencia a los trabajadores de Santiago. Tras obtener un compromiso de pago la próxima semana, UTA regresó al encuentro y selló el acuerdo (precario) con Ersa.
El paso siguiente fue reunirse en asamblea con los trabajadores en la sede de la empresa y aunque se esperaba que se levantara el paro de manera inmediata, los choferes manifestaron su enojo por la situación. Fue una asamblea "caliente" en la que finalmente la mayoría optó por brindar hoy el servicio, pero un grupo se mostraba inflexible con mantener el paro.
José Coronel, secretario de Finanzas de UTA, señaló a EL LIBERAL que es "un principio de solución; la empresa va a depositar el martes la diferencia y estará para cobrar el miércoles".
No obstante, trazó un panorama crítico al señalar que la empresa manifestó en la reunión en la Secretaría de Trabajo que "si la problemática no se soluciona (aumento de subsidios o actualización tarifaria para cubrir mayores costos), está comprometido el pago del sueldo del mes de noviembre".
"Es una solución parcial, es un parche, es un acuerdo con alambres", graficó Coronel, quien advirtió que "de aquí a fin de año vamos a tener problemas constantes".
Extorsión
El secretario general de UTA, Jorge Pacheco, fue más duro con la empresa, a la que acusó de no pagar, como una manera de extorsionar al municipio por más fondos.
"Ahora que ofrecen pagar entiendo que la solución estaba desde un primer momento. Nunca tuvo que haber sucedido este paro", sostuvo.
Sostuvo que este 5,7% de aumento "no era una sorpresa ni un nuevo incremento. Pone de resalto, que es un mecanismo de negociación y presión que ha quedado develado, casi como una extorsión al municipio y que afectó gravemente a los usuarios", dijo sobre la actitud de Ersa, apuntando que igual mecanismo utilizó en otras ciudades donde presta servicio.
En sintonía, el fiscal municipal Martín Ramos juzgó que es "evidente que el método de negociación de la empresa es provocar un paro de los empleados para presionar un aumento de tarifa o el otorgamiento de subsidios, prueba de ello es lo que ocurre hoy mismo en la ciudad de Paraná y Corrientes, en donde los empleados están de paro. Al igual que semanas atrás en la ciudad de Córdoba".
"Con la recaudación de menos de un día de trabajo por corte de boleto se pagaba la deuda que tenían con los empleados, que motivaron el paro en la ciudad capital, al margen de los subsidios que reciben de Nación y Provincia", expresó.