Sentenciaron a siete años de cárcel a joven que asesinó a un rugbier en Añatuya, en 2014 Sentenciaron a siete años de cárcel a joven que asesinó a un rugbier en Añatuya, en 2014
Un tribunal realizó ayer una cesura de juicio y condenó a siete años de prisión al homicida del rugbier añatuyense, Franco Gabriel ‘Toti’ Cáceres, asesinado a puñaladas en abril del 2014 en la vía pública.
La pena recayó en contra de Javier ‘Uya’ Pérez, quien al momento del homicidio era menor de edad y en el juicio (agosto del 2016) fue declarado penalmente responsable, pero aquel tribunal dispuso un tratamiento tutelar intra muros.
En esa jornada, los jueces emitieron una dura sentencia contra los otros detenidos: Fabio Sequeira, Pascual Banegas, Víctor Sequeira y Jorge Pérez, padre de ‘Uya’, condenándolos a perpetua, ya confirmado por la Cámara de Apelaciones.
Según la causa de la fiscal María Emilia Ganem, “Uya” golpeó primero al hermano de “Toti” y después hubo un segundo incidente, mucho más grave.
En él, “Toti” doblegó a trompadas a “Uya”, quien huyó en busca de refuerzos. Regresó con los 4 aliados y venció la férrea resistencia de la víctima.
De acuerdo a los testigos, mientras lo apuñalaba, “Uya” le dijo a “Toti”: “No te aguantaste unos cuantos cortes...”.
“Desprecio por la vida”
Según los psicólogos, los individuos se regían a contrapelo de los parámetros sociales.
Atacaron a un joven y lo asesinaron, sin conmoverse, lo cual delató su “desprecio por la vida”, concluyeron los expertos.
Cinco años después, “Uya” se sentó frente a un tribunal en la víspera, a media mañana.
La fiscal desandó la historia y pidió no olvidar que hubo una vida arrebatada a una familia.
Desde esa realidad innegable y shockeante, pidió 11 años de cárcel para “Uya” Pérez.
Sin embargo, su suerte estuvo regida por las leyes de la minoridad y desde ese cuadro, el tribunal fijó 7 años de cárcel.
Retornó a prisión después del mediodía. Y a diferencia de los cuatro condenados a perpetua, él tiene un atisbo de esperanza, ya que su paso por la cárcel sería mucho menor.