La defensa del homicida del patovica sostuvo que el joven actuó drogado y le asestó nueve puñaladas

Los homicidas del patovica Carlos Fabián Brandán prefirieron el silencio y sus abogados defensores argumentaron que se trató de una pelea caracterizada por la presencia de drogas, en la que los acusados actuaron bajo sus efectos.

Así lo determinó el abogado Osvaldo Pérez Roberti que representa a Federico "Ñato" Espinoza, de 18 aÑos, sindicado de ser quien acuchilló a la víctima. Con la misma estrategia se manejaron los defensores del otro imputado, Jonatan Gabriel "Jona" Espinoza, de 29, tío del primero.

Se trata de los doctores Franco Cejas Escalada, Carla Millán y Roxana Mera.

El hecho ocurrió el 20 de junio de 2016. Como se recordará ambos irrumpieron en un pub de Las Termas, mientras Brandán cuidaba la puerta.

Según cuatro testigos que declararon ayer, el patovica les impidió el paso al verlos ebrios. "Jona" Espinoza entonces le arrojó un vaso con cerveza y se dio vuelta para irse, pero por detrás lo alcanzó el patovica y lo sujetó del cuerpo.

Sobrevino una pelea, en la cual terció el sobrino "Ñato" con un cuchillo y lo hirió mortalmente.

La Fiscalía acusa a los dos parientes por "homicidio doblemente calificado por alevosía y ensaÑamiento", delito reprimido con prisión perpetua.

Enfrente, los abogados defensores rechazaron los cargos y juzgaron que se trató de un "homicidio simple quizá con exceso en legítima defensa".

Con posiciones diametralmente opuestas, el tribunal escuchó a cuatro testigos presenciales.

Todos dejaron entrever que vieron la pelea y al patovica tirado en el pavimento. También los jueces les mostraron el cuchillo secuestrado, pero ninguno lo reconoció como el arma homicida. Hoy declaran los médicos y forenses que realizaron la autopsia.