"Éste era mi tesoro y ya no queda nada, ahora empieza todo otra vez", dijo Raúl Basbús "Éste era mi tesoro y ya no queda nada, ahora empieza todo otra vez", dijo Raúl Basbús
Con la mente puesta en lo que viene, Raúl Basbús -dueño de la papelería céntrica que sufrió un grave incendio- ya analiza cómo salir adelante con su trabajo y volver a "levantar" el negocio familiar que comenzó hace 74 años.
Basbús, consternado por lo sucedido, pero con la firme convicción de salir adelante, recibió a EL LIBERAL y contó cómo vivió el momento en el que le avisaron que el trabajo de su vida estaba siendo devorado por el fuego.
"Era una locura total. Llegué aquí y las llamas salían por todas partes. Era algo increíble y los bomberos trabajando a destajo. Más de lo que se hizo no se podía hacer. El humo y el fuego salían por todos lados, esto era un horno. Nadie se podía arrimar. No había agua que pudiera controlarlo. Estaba en el medio de esa locura, aún siento el olor a humo en mi nariz", explicó.
Basbús, quien siguió todo el siniestro en medio de la Belgrano la madrugada del sábado, contó: "Sentí impotencia de no poder hacer absolutamente nada. Solo ver cómo todo se incendiaba. Solo podía ver y no hacer nada. Esto era todo lo mío. Este era mi tesoro y ya no queda nada. Era el fruto de trabajo de muchos años y de mucho esfuerzo".
Mientras permanecía parado sobre las cenizas de lo que era "su tesoro", sostuvo: "No existen más los depósitos, no existe más nada. Ahora los arquitectos e ingenieros van a diagramar un tipo de depósito que sea más inteligente que el que tenía, pero eso no sé. Ellos son los expertos, por ahora todo es muy reciente". Con fe y con todas las muestras de cariño que recibió remarcó: "Ahora tenemos que pensar en el futuro, ponernos de pie, pergeñar un nuevo salón".
Convicción
Creemos en Dios y le agradecemos a Dios porque a pesar de todo esto siempre hay una enseñanza. Aprendí que a pesar de todo, tenemos el apoyo de la gente, el apoyo moral. Alguien me dijo: "La sociedad de Santiago del Estero está compungida" y eso te hace aún más responsable. Nos hace tener más obligación con la gente que nos quiere, con la que nos apoya. Es una sensación muy linda. Las muestras de afecto te obligan a seguir trabajando".
"Evidentemente es toda una historia la Papelería Basbús, quien alguna vez en su vida no ha pasado por aquí. Queremos hacer honor a esa empatía que tiene la gente para con nosotros. Por supuesto que nos va a llevar un tiempo, nada es de la noche a la mañana; lo único que fue la noche a la mañana es que 74 años se fueron en dos días, pero volveremos a trabajar como siempre porque es lo único que sabemos hacer", indicó.
Historia
"La papelería nació antes, incluso, de mi existencia. La fundó mi padre y estaba ubicada en Pellegrini 11. En el año 68 nos mudamos. Allí empecé a trabajar yo, tenía 20 años. Ya sabíamos vender. Es lo único que aprendimos, a trabajar. Mi papá además era viajante, y nos legó la historia", contó Raúl visiblemente emocionado.
"Cuando vinimos a la Belgrano, todo era muy incipiente, muy chico y con mucho esfuerzo de mi padre, de mi hermano menor pudimos darle un impulso importante y así hemos construido la papelería", manifestó.
Basbús sostuvo: "A pesar de todas las vicisitudes hoy hemos abierto el negocio. Hoy fue el peor día de mi vida. Hoy empieza el duelo. O sea que ya pasó, ya se llevaron la mortaja y, ¿ahora? Ahora tenemos que hablar con los proveedores, con los clientes, con la gente que le debo, con la gente que nos debe. Hoy empieza el "trabajo sucio" y lo vamos a hacer.
"Por suerte el salón de venta no fue alcanzado por el fuego, estaba un poco vacío porque al comienzo de las clases nos ‘saquearon’ los clientes y el día sábado íbamos a reponer la mercadería abasteciéndonos de los depósitos".
Mientras la fiscalía continúa con las averiguaciones para determinar si se trató de un accidente o de un atentado, el comercio empezará a atender al público como lo hace desde hace varios años.