Definen la suerte de "Pitu" Bravo, la joven acusada de asesinar a su ex novia y simular su suicidio Definen la suerte de "Pitu" Bravo, la joven acusada de asesinar a su ex novia y simular su suicidio
Natalia "Pitu" Bravo podría sufrir un duro revés judicial si el juez de Control y Garantías dicta la prisión preventiva en su contra. La joven está imputada por el supuesto homicidio de Yohana Suárez (20), su ex novia. En la última audiencia se ventilaron detalles de una relación marcada por hechos de violencia y manipulación, que habrían terminado de la peor manera.
A principios de septiembre, Yohana fue hallada sin vida en su casa del barrio La Católica. Rodeando su cuello había un cable y todo parecía indicar que se trataba de un suicidio, sin embargo los investigadores advirtieron que algunas piezas no encajaban en el rompecabezas.
La acusada, "Pitu" Bravo, habría manifestado a unos vecinos que Suárez se había quitado la vida, que ella la había encontrado pendiendo de un cable, que trató de auxiliarla, pero que ya era demasiado tarde.
Casi un mes más tarde, Bravo fue detenida después de que se corroborara que Yohana no se había suicidado, sino que había sido asesinada. Todas las sospechas recayeron sobre su ex novia, la cual permanece aún privada de su libertad.
El fiscal del caso, Dr. Ramón Rubén Alfonzo solicitó el pasado lunes la prisión preventiva para "Pitu", entendiendo que en libertad podría entorpecer la investigación. La defensa de la imputada, representada por la Dra. Alejandra Medina, se opuso al pedido de la Fiscalía y requirió que se extiendan los plazos para que continúe la investigación -podría ser prorrogada la detención por 15 días más- hasta que se obtengan resultados de pericias que aporten mayor claridad en el proceso.
El juez de Control y Garantías, Dr. Fernando Paradelo, decidió diferir su resolución y mañana dará a conocer su decisión. "Pitu" Bravo enfrenta graves cargos, por la supuesta comisión de "homicidio calificado por el vínculo". El magistrado definirá su suerte este lunes.
El caso
Pese a que formalmente ya no eran pareja, las dos mujeres habrían continuado manteniendo contacto. Los vecinos dan cuenta de que veían que Bravo frecuentaba la casa de la víctima y también refirieron que se escucharon algunas discusiones.
El fatídico día que Yoahana fue hallada muerta, los testimonios indican que vieron a Bravo retirarse antes del inmueble, para regresar luego y afirmar que la había encontrado sin vida.
Cuando los policías advirtieron algunos aspectos extraños, comunicaron la situación al fiscal Alfonzo, quien dispuso la intervención del personal de la División Homicidios y Delitos Complejos, quienes tras examinar la escena, concluyeron que no se trataba de un suicidio, era un crimen.
Las fuentes revelaron que los detectives indicaron que las marcas en el cuello de la víctima no se correspondían con un ahorcamiento por la caída del cuerpo, sino por una acción mecánica, y que la extensión del cable era superior a la altura necesaria para que el cuerpo pueda quedar pendiendo. El celular de la víctima no pudo ser hallado en primera instancia. Posteriormente la Policía logró ubicarlo en poder de la sospechosa.