En choque frontal con una camioneta, muere motociclista en Mansupa

El departamento Río Hondo vuelve a lamentar una muerte por siniestro viales, en esta ocasión, un accidente dejó como saldo una víctima fatal, en un hecho registrado cerca de las 18 horas del sábado sobre ruta nacional 9, en el kilómetro 1212, a la altura de la localidad de Mansupa.

Una mujer, identificada como Deolinda Décima de 32 años y oriunda de Colonia Tinco, falleció a causa de graves heridas, tras ser colisionada por una camioneta cuyo conductor habría estado alcoholizado. El conductor de la camioneta, una Chevrolet, color roja, era guiada por el ciudadano José Isidro Soria, domiciliado en el mismo pueblo del cual era la víctima fatal.

La joven mujer se trasladaba en una motocicleta Honda Biz 110 cc. color roja, y lo hacía por ruta 9 de norte a sur, desde su pueblo hasta Las Termas, y la camioneta lo hacía en sentido contrario.

De acuerdo al testimonio de un camionero, el rodado mayor se cruzó de carril chocando de frente a la joven, la cual voló, golpeando en la camioneta y luego cayendo pesadamente en medio de la cinta asfáltica, mientras que la camioneta siguió unos cien metros, quedando medio del monte, a unos cincuenta metros de la ruta.

Producto de la fuerte colisión, la mujer sufrió fracturas que le costaron la vida de forma inmediata, sin sufrir lesiones en la cabeza, ya que llevaba colocado correctamente el caso protector.

En pocos minutos, la zona fue invadida por curiosos, ya que a pocos metros se desarrollaba una peña.

El fiscal interviniente, Dr. Ricardo Lissi, dispuso la aprehensión del chofer de la camioneta, siendo trasladado a la alcaidía de la Departamental 6, previo examen médico, que determinó que no presentaba lesiones, pero sí un fuerte aliento etílico.

Trabajó en el lugar, personal de la comisaría 40, Criminalística, personal de la concesionaria vial, y Bomberos Voluntarios, que procedieron al levantamiento del cuerpo de la víctima.

Otros datos

Deolinda Décima, la joven víctima, se trasladaba desde Colonia Tinco hasta Las Termas, ya que ingresaba en el segundo turno en un hotel donde ya se desempeñaba hace bastante tiempo. La joven, había comprado hace poco tiempo su motocicleta para poder trasladarse a su lugar de trabajo.

En el lugar, algunos conocidos de la joven no salían del estupor y la congoja, además de la impotencia al ver el triste final de la mujer, a la cual recordaron como una persona alegre, trabajadora y muy responsable.