Pensó que estaba desvanecida

Sobre el momento de su detención, el imputado manifestó que vio a los hijos de ella jugando a cinco metros de la casa pero no les dijo ni preguntó nada sobre la discusión, creyendo que habrían escuchado lo que ella le gritaba cuando comenzó la pelea.

Quisbert manifestó que no pensó que estaba muerta sino desvanecida. Al llegar personal policial de la Seccional 15 entraron a la cocina y luego dijeron que iba a tener que acompañarlos para declarar lo que pasó. Allí lo hicieron subir a un móvil policial, desde donde los efectivos pedían una ambulancia por radio y luego directamente la Unidad Morguera. Allí se enteró que la mujer estaba muerta.

Según indicó, no se resistió a la detención cuando la policía lo interceptó en la vereda frente a la casa. Sobre su supuesto intento de fuga manifestó que sólo intentaba hablar con alguno de sus hermanos para avisarles que era detenido, pero no pudo hacerlo, porque no encontraba señal con el celular.