El cordobés Cristian Leyría aseguró que los troqueles truchos se los enviaba a Walter Rago El cordobés Cristian Leyría aseguró que los troqueles truchos se los enviaba a Walter Rago
El empresario cordobés Cristian Leyría, supuesto ideólogo y cerebro de la organización que pergeñó una millonaria defraudación en contra del Pami, amplió su declaración indagatoria y habría admitido que conocía a algunos de los santiagueños implicados y habría reconocido que los troqueles apócrifos que se le secuestraron de su domicilio, se los enviaba a Walter Rago.
Leyría permanece detenido desde el pasado jueves 21 de julio, cuando Gendarmería Nacional irrumpió en su "búnker" en un barrio privado de la vecina provincia, y procedió a su detención y al secuestro de importante documentación y planchas con 1.500 troqueles truchos.
Sobre el empresario -dueño de una droguería- pesan los cargos como supuesto miembro de una asociación ilícita; sin embargo en su ampliación de declaración indagatoria, Leyría habría tratado de demostrar que él no era el líder ni miembro de la organización delictiva.
Según precisaron las fuentes, el acusado fue trasladado minutos después de las 9 al Juzgado Federal y su declaración se extendió hasta pasado el mediodía.
Pese al hermetismo en torno al contenido de la declaración del cordobés, fuentes ligadas al caso confiaron que "aportó bastantes elementos que permiten continuar con la investigación".
Revelaciones
Leyría habría explicado detalladamente cuál era su ocupación, y luego habría manifestado cuál era su relación con cada uno de los otros 15 implicados en la compleja causa. A varios no los conocía, con otros mantenía una relación comercial y algunos eran incluso sus amigos, afirmaron las fuentes.
EL LIBERAL ya había revelado tras la detención del cordobés, que había compartido viajes al exterior con Juan José Sánchez, también involucrado en el proceso, quien se entregó a la Justicia a mediados de julio y luego fue excarcelado.
Las fuentes señalaron que Leyría habría comprometido también la situación de Walter Rago, acusado de liderar un grupo que habría formado parte de una organización mayor que concretó la defraudación en perjuicio de la obra social de los jubilados. De hecho, Rago fue procesado en carácter de jefe de asociación ilícita semanas atrás.
En su declaración el empresario cordobés habría deslizado que los troqueles apócrifos que él tenía en su casa, se los enviaba a Walter Rago. De esa manera no solamente confirmó el vínculo con el comerciante santiagueño, sino que también complicó su situación.
Al mismo tiempo, las fuentes apuntaron que Leyría habría aportado otros nombres tanto de santiagueños "como de otros lugares".
Derivaciones
Finalizada la ampliación de su declaración, Cristian Leyría regresó a su lugar de detención en las instalaciones de Gendarmería Nacional en esta ciudad.
Fuentes judiciales señalaron que ahora el fiscal federal Pedro Simón y el juez federal Guillermo Molinari analizarán el contenido de la versión que brindó el empresario cordobés y no descartaban que en la próxima semana se concreten nuevas medidas, entre ellas algunos allanamientos.
Por otra parte, las fuentes confiaron que los magistrados también comenzarán a trabajar la semana entrante en la resolución de la situación procesal de los últimos diez acusados, los cuales fueron apresados en su mayoría el 13 de julio último.
En los próximos días podrían surgir importantes novedades en torno al complejo caso.
Cabe recordar que la Justicia Federal investiga una defraudación por más de 154 millones de pesos a la obra social de los jubilados con la facturación de insulina y tiras reactivas para diabéticos, utilizando en la mayoría de los casos documentación apócrifa e incluso identidades de afiliados fallecidos.