Otro menor cierra el cerco sobre el sexteto al que le endilgan el rapto y el homicidio de Marito Salto

"Avanzamos a pasos agigantados", señaló brevemente ayer el juez Miguel Moreno, al término de una Cámara Gesell a un menor (de 14 años) que habría visto a Marito Salto, junto a la represa, acompañado por dos hombres.

El niño apareció asesinado, mutilado, la mañana del 2 de junio en un camino junto a la ruta 6, entre Otumpa y Quimilí, departamento Moreno. Aún cauto, en la víspera el magistrado manifestó: "El menor es de Quimilí. Al igual que otras personas, identifica a los sospechosos...", afimó a los periodistas.

El sexteto preso

Extraoficialmente, trascendió que el menor individualizó al menos a uno de los seis detenidos: ellos son los hermanos Ocaranza, Sequeira, Rodríguez, Ledesma y Herrera.

Según voceros judiciales, tres fueron imputados por "encubrimiento". Los restantes, por "abuso sexual con acceso carnal seguido de muerte" del niño Mario Salto.

Requerido por la prensa, Moreno manifestó: "Este fin de semana hemos avanzado muchísimo. Como hoy, giramos numerosas medidas, sobre todo diligencias pendientes. Por ejemplo, hoy (por ayer) hicimos una Cámara Gesell. Necesitábamos el testimonio. Tenemos la fe, la esperanza, de que vamos por el buen camino".

Conexidad

Consultado sobre lo dicho por los testigos clave, el juez respondió: "Hay conexidad entre la mayoría".

Interrogado en qué consisten las tres teorías en que es edificado el proceso, Moreno fue más prudente aún: "Algunas hipótesis están relacionadas entre sí. Iremos descartando sobre la marcha, las menos importantes".

Más adelante, el juez exteriorizó su gratitud a la colaboración de muchas personas de Quimilí.

"Saben, los testimonios más importantes ya los tenemos. Es trascendente el compromiso de la ciudadanía, al acercarse a los investigadores y aportar datos", dijo Moreno.

Al pedírsele una opinión sobre el silencio en algunas personas, el juez subrayó: "Son cuestiones que no valoro", concluyó el funcionario.