Tras su detención, apuran la extradición de Pérez Corradi Tras su detención, apuran la extradición de Pérez Corradi
De nada le sirvió a Ibar Esteban Pérez Corradi pagar 50.000 dólares a un médico brasileño para que le borrara parcialmente las huellas digitales y así evitar que lo identificaran. Tampoco le valieron las dos cédulas de personas muertas que había comprado a un grupo de policías paraguayos corruptos, por las que pagó US$ 200.000. Ni los casi 100.000 mensuales que pasaba a un cerrado grupo de jefes de la Policía Nacional de Investigaciones de Paraguay para que lo protegieran, y que hasta hace un mes le habían bastado para mantenerse en la clandestinidad.
Ayer, minutos después de las 9, Pérez Corradi, uno de los prófugos más buscados de la Argentina, fue detenido cuando salía de un departamento de la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, situado en la avenida Iguazú al 400, a pocos metros del cruce con la calle Heleno Schimmelpfeng y detrás del estadio Flamenguinho, en el barrio Vila Yolanda en la Triple Frontera, la misma zona donde, hace cinco meses, que se había instalado.
Por la tarde fue trasladado a Asunción y quedó alojado en la Agrupación Especializada de la Policía Nacional, a la espera de su extradición a la Argentina, que se concretaría en los próximos días.
Hoy, a las 8, Pérez Corradi será llevado a los tribunales de Asunción ante la fiscal Sandra Quiñones, que lo indagará por la falsificación de la cédula de identidad N° 1.433.627, que había comprado, a nombre de Walter Ortega Molinas, un paraguayo que murió el 4 de marzo de 2004 en un accidente ocurrido en Fernando de la Mora. También lo acusan de adquirir el pasaporte K282782.
Luego, Pérez Corradi, acusado por un tribunal oral criminal de Mercedes de ser el presunto instigador de los homicidios de Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina, será llevado ante el magistrado paraguayo que interviene en el proceso de extradición, quien le comunicará que existe un requerimiento de la justicia argentina por el triple crimen de General Rodríguez.