El crimen de Estela López de Auad lleva más de cinco meses de impunidad

La investigación por el crimen de la empresaria Estela López de Auad lleva más de cinco meses, pero aún no hay pistas firmes de quién pudo haber cometido el brutal asesinato. Son diversas (y desconocidas) las hipótesis sobre las que trabaja la Justicia y la Policía, pero sí está claro que hay pocas certezas en cuanto a resultados de pericias y testimonios de valor.

Durante el tiempo que transcurrió desde la muerte de López de Auad hasta la actualidad, la causa dio numerosos giros, pero aún no parece haber encontrado el norte. De la consulta con analistas jurídicos y especialistas en criminología, se pueden resaltar cinco puntos clave para entender la compleja investigación. 

1. Escena del crimen

El primer punto en el que coincidieron todas las fuentes consultadas, es lo increíble que resulta que de la escena del crimen no se haya podido identificar pistas más firmes del o los asesinos.

Estela López fue ultimada de más de 20 puñaladas en el interior de su casa. Fue hallada por su hijo en medio de un charco de sangre y con un cuchillo clavado en el cuello. El autor del brutal asesinato se habría cambiado de ropa en el interior del inmueble y recién luego se fue de la casa de calle San Martín casi Moreno.

Hasta ahora -al menos de lo que se informó oficialmente- no se encontró ninguna huella dactilar, ningún rastro orgánico que permita identificar un patrón genético, apenas unas pisadas que poco habrían contribuido hasta el momento. Los especialistas afirman que no hallar una pista concreta en la escena descripta resulta decepcionante. 

2. Las pericias

Esta situación está ligada con el segundo punto que remarcan los analistas: la falta de resultado en las pericias.

En cinco meses de investigación, y con la intervención de dos jueces hasta el momento por la recusación -aún sin resolver- del primero, es escasa la información sobre los resultados de dichas pruebas.

Cabe recordar que se tomaron muestras genéticas que fueron enviadas al Laboratorio de Genética Forense de Jujuy, cuyos resultados nunca se conocieron. Tampoco fueron develados por alguna voz oficial los resultados de las pericias realizadas en un automóvil de una de las personas investigadas. 

3. único detenido

Los analistas también coincidieron que en cualquier reflexión sobre la causa, no se puede pasar por alto que sólo hubo un hombre detenido en el proceso, el vendedor de camiones tucumano Enrique Gini, el cual pasó casi dos meses tras las rejas, pero luego fue liberado ya que tenía pruebas de que no estuvo con la víctima a la hora de su muerte. 

4. Sospechas

El cuarto punto es uno sobre el que giran hoy gran parte de las actuaciones: la situación de la abogada Silvia Basbús. Su nombre comenzó a circular cuando desde una cuenta de Facebook falsa arrojaron que la letrada era la autora del crimen. El juez Moreno, que dirigía por ese entonces la causa, la citó como testigo. Sin embargo Basbús recibió un trato de imputada, se le allanó su casa, le secuestraron calzado y un auto. A pesar de este presunto atropello, la letrada tardó más de dos meses en hacer una aparición pública y en una entrevista concedida a EL LIBERAL se defendió de las acusaciones, haciendo una fuerte crítica al juez Moreno y al fiscal Alfonzo, así como también al papel que jugó el Colegio de Abogados. Pese a ello, los analistas consultados miran con cierta reserva algunas acciones de la abogada investigada, principalmente la recusación al juez y al fiscal, sin ser parte del proceso ya que nunca había sido imputada, así como también un pedido de eximición de prisión, en uno de los momentos más álgidos del proceso. 

5. Todo confuso

El último punto en el que los especialistas hacen hincapié en su análisis, es el momento actual de la causa, donde lejos de hablarse de sospechosos o de pruebas, todo gira en torno de recusaciones, excusaciones y planteos.

Desde principios de abril el caso está en manos de la jueza Rosa Falco. La magistrada decretó el secreto de sumario y luego lo prorrogó. Cumplidos los plazos, el hermetismo continuó y aún persiste.

Es incierto si la causa quedará o no en sus manos; el tribunal de la Cámara de Apelaciones que debe resolver la recusación al juez Moreno aún no se expidió. Tampoco es seguro si el fiscal Alfonzo continuará en el proceso después de su pedido de apartamiento.

Uno de los camaristas, el Dr. Abelardo Basbús, se excusó recién la semana pasada con el agravante que tal postura le fue rechazada y ahora deberá pronunciarse si sigue Moreno o si queda Falco.

Pasaron más de cinco meses y hay demasiados interrogantes, pero también hay una familia que espera que se haga justicia y un joven que perdió a su madre, cuyo único consuelo sería ver a los culpables tras las rejas.

Cabe aclarar que en este análisis los especialistas tuvieron en cuenta sólo los aspectos que son de público conocimiento, con la incertidumbre de no saber si la Justicia está guardando para no entorpecer la investigación otros elementos que revelen quién fue el autor de un crimen que mantiene en vilo a la sociedad.