Es "desesperada" la situación de rohinyás en Bangladesh Es "desesperada" la situación de rohinyás en Bangladesh
DACCA, Bangladesh. La suerte de los 436.000 rohinyás huidos a Bangladesh por la ola de violencia en Myanmar (exBirmania) no mejoró, cuando se cumple un mes del estallido de la crisis de refugiados, y su situación se convirtió en "desesperada" y puede empeorar, según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur).
"Su situación sigue siendo desesperada, y nos arriesgamos a un deterioro dramático si la ayuda no se intensifica rápidamente", alertó en rueda de prensa en Dacca el máximo representante de Acnur, Filippo Grandi, quien visitó este fin de semana los precarios y superpoblados campamentos rohinyás instalados en el sureste de Bangladesh.
Para evitar el empeoramiento de las ya extremas condiciones de las decenas de miles de rohinyás llegados a Bangladesh, Grandi pidió un refuerzo de la ayuda humanitaria: "Se necesita más, y rápido, si queremos evitar un mayor deterioro".
El responsable de Acnur aseguró que encontró personas "profundamente traumatizadas" y expuestas aún a "enormes dificultades" en el campamento de Kutupalong, uno de los más grandes y poblados.
"Han visto aldeas arder, a familias tiroteadas o muertas a machetazos, mujeres y chicas que han sido brutalmente tratadas. A muchos de ellos les gustaría volver a casa, pero para eso es necesario el fin de la violencia", dijo.
La ONU calificó días atrás la acción militar de Myanmar de "limpieza étnica de libro".