"Derribaremos los muros y superaremos todas las fronteras" "Derribaremos los muros y superaremos todas las fronteras"
Derribar muros y superar fronteras, concordia entre todos los pueblos del mundo, misericordia, esperanza y paz, para contrarrestar "todas las guerras que destruyen el mundo en que vivimos", pidió el Papa en una plegaria que recitó ante la estatua de la Virgen de Fátima, en la Capilla de las Apariciones, el sitio más sagrado del santuario mariano portugués.
Allí, el 13 de mayo de 1917, una "Señora vestida de blanco" se le apareció a tres pastorcitos analfabetos que cuidaban su rebaño -Lucía, Francisco y Jacinta-, dando inicio a una devoción popular que traspasó las fronteras de Portugal, famosa por sus "tres secretos" revelados en seis diversas apariciones.
En la oración, que pronunció en portugués ante la estatua, el Papa se describió a sí mismo como un "obispo vestido de blanco", retomando las palabras mencionadas en el último de los tres secretos. éste, en efecto, hablaba de un "obispo vestido de blanco" que "cae a tierra como muerto bajo los disparos de armas de fuego" y fue revelado, después de décadas de misterio, en mayo de 2000 por San Juan Pablo II, quien relacionó esta visión con el atentado que sufrió el 13 de mayo de 1981 -Día de la Virgen de Fátima- a manos del turco Mehmet Alí Agca.
"En este lugar, desde el que hace cien años manifestaste a todo el mundo los designios de la misericordia de nuestro Dios, miro tu túnica de luz y, como obispo vestido de blanco, tengo presente a todos aquellos que, vestidos con tu blancura bautismal, quieren vivir en Dios y recitan los misterios de Cristo para obtener la paz", dijo Francisco en su oración.
También le rogó que mire "los dolores de la familia humana que gime y llora en este valle de lágrimas". Información publicada en diario EL LIBERAL. Director Lic. Gustavo Ick.