Monseñor Melitón Chávez celebró misa en la Alcaidia de Añatuya

El prelado estuvo acompañando a privados de la libertad y sus familias, y llevando la palabra de Dios, y alentando a una conversión sincera a los allí alojados. Tras la celebración religiosa, el obispo brindó con los detenidos y sus familiares.

En su homilía puntualizó "siempre el señor esta viniendo a nuestra vida. Su mensaje de amor expresado en su nacimiento, es una forma concreta de vivir nuestra fe.

Dios sale a nuestro encuentro sorprendiéndonos en la noche de Belén, para que desde esa pequeñez, la sencillez, esa pobreza y la ternura de ese momento del nacimiento de un niño, se expresara la respuesta de Dios a toda las realidades de la humanidad, las más hermosas y las más duras realidades, sobre todo la realidad de la muerte, la realidad del pecado y del abandono.

Y este nacimiento de Dios hecho hombre, es un mensaje, en primer lugar a nosotros, a la dureza de nuestros corazones, debemos sacudir un poquito ese corazón soberbio nuestro que muchas veces busca tantas formas de reaccionar ante el mal, tantas formas equivocadas de responder la violencia con violencia, vivir toda la vida defendiéndose, vivir acusando, buscando cómo levantar una piedra para tirarle al otro, como agredir, como acusar, como safar de las distintas situaciones a veces con la mentira, acusando a los a los demás y dañando.

Lamentablemente, en el mundo entero, la violencia, la pobreza, la desigualdad, la frialdad de los corazones de los hombres, hacen olvidar de lo importante que es el valor de las personas, el valor infinito que tiene cada ser humano, sea pequeño o sea grande, sea rico o sea pobre, sea bueno o sea malo. Cada persona tienen para Dios un valor infinito. Y eso lo ha demostrado Dios haciéndose pequeño, indefenso; ese lenguaje de lo que llamamos la ternura de Dios.

Nadie podía imaginar que Dios viniera así. Todos a veces invocamos a Dios para que sea justo, y decimos ''''que limpie el mundo de tantos males''''.

Cuántas veces nosotros hemos pensado así:, ''''Dios mio, porque los malos no dejan de existir, y existimos solamente nosotros los buenos?'''' pensando que nosotros somos los buenos. ¿Quién a dicho que nosotros somos los buenos?; en cada corazón nuestro añida esa doble realidad, de nuestra dualidad. Todos necesitamos el perdón, ser amados y comprendidos" indicó.