A Central Córdoba le faltó la puntada final para quedarse con la victoria

Un auspicioso debut tuvo ayer Central Córdoba en el torneo de la Liga Profesional. A pesar de que no pudo ganar como local, el empate 1 a 1 ante Banfield dejó buenas sensaciones de parte del equipo de Gustavo Coleoni, que hizo los méritos suficientes como para quedarse con los tres puntos pero chocó con Facundo Altamirano, el arquero visitante que se erigió en la figura del cotejo.

Giuliano Galoppo, a los 20 minutos de la primera parte, puso en ventaja el “Taladro” y Milton Giménez, a los 43’ de la misma etapa y de penal, selló la igualdad en el encuentro que se disputó en el Estadio único “Madre de Ciudades” y que correspondió a la primera fecha.

Central Córdoba arrancó con una presión alta y propuso un juego directo. Cada vez que recuperaba o tenía la pelota, trataba de salir rápido, buscando saltear líneas y encontrar a Sequeira (por derecha) o Lattanzio (por izquierda) para generar desequilibrio con su velocidad.

Un poco por las imprecisiones propias y otro tanto porque Banfield estaba bien plantado atrás, Central no podía prosperar con su plan. Pero dentro de ese vértigo generó una chance clara para abrir el marcador a los 6 minutos, cuando Sequeira apareció por izquierda en el área, tras un lateral en forma de centro de Bay, y el arquero tapó con el pecho su remate.

El “Taladro” comenzó a tener más la pelota y la hacía circular de lado a lado, con mucha paciencia para encontrar algún hueco. Y lo encontró a los 20’, cuando triangularon por izquierda Quintero, álvarez y Galoppo, quien encaró hacia el área, aprovechó el rebote cuando Maciel salió apurado a cortar y definió cruzado para dejar sin chances a Mehring.

Después del 1 a 0, Banfield le cedió la pelota a Central. Y el dueño de casa buscó por momentos con paciencia y tratando de hacer ancha la cancha, usando mucho a Sequeira por derecha para lastimar. Un centro de Leo, que no pudo conectar de lleno con su cabeza Giménez, y un remate de emboquillada de Galeano que pasó cerca fueron las aproximaciones más claras del “Ferro”.

Hasta que a los 42’ Giménez intentó por el medio y su remate encontró el brazo muy abierto de Lollo. Penal que el goleador se encargó de canjear por gol, con un remate alto y al medio del arco, para que al descanso se fueran con un resultado mucho más acorde al desarrollo del partido.

Segundo tiempo

En el complemento Central salió con todo, quizás impulsado por el envión del empate sobre el cierre de la primera etapa. Y en el primer cuarto de hora tuvo tres chances muy claras para desnivelar. A los 6’ Lattanzio apareció por izquierda y le rompió el travesaño a Altamirano, mientras que Sequeira se pasó en el rebote. A los 12’ lo tuvo Bettini, tras otro lateral-centro de Bay que peinó Giménez, pero el arquero visitante se lució al desviarle el remate. Y a los 15’ otra vez Altamirano tuvo una atajada magnífica, abajo a su derecha, esta vez ante un remate de Sequeira, luego de un pase de Giménez en una salida rápida del dueño de casa a partir de una recuperación en el mediocampo.

Central Córdoba pudo sostener la intensidad hasta la media hora. Después Banfield con sus hombres de refresco, especialmente el colombiano Mauricio Cuero, lo emparejó y por momentos complicó a la última línea del local.

Con el ingreso de López Muñoz, Central recuperó dinamismo por izquierda y puso en aprietos a Banfield, pero Altamirano a esa altura parecía imbatible.

Sobre el final sufrió un poco el equipo de Coleoni, especialmente en un error de Mehring que por muy poco no terminó en gol (del banco de Sanguinetti reclamaron penal del arquero sobre Enrique). Pero si el empate tuvo sabor a poco para Central, una derrota hubiese sido exagerada.