Yamaha presentó su equipo con Maverick Viñales y Valentino Rossi

Arranca el segundo año del Movistar Yamaha con Valentino Rossi y Maverick Viñales como compañeros de box. La presentación oficial fue en Madrid, con la presencia del fenómeno de Tavullia, que cumplirá 39 años en tres semanas (16-2-79), y Mack, que acaba de cumplir los 23 (12-1-95).

No fue un acto cualquiera, porque el español aprovechó la ocasión para anunciar su renovación con la fábrica de los diapasones por dos años más (2019 y 2020), haciendo así oídos sordos a la importante oferta que tenía encima de la mesa para regresar a Suzuki.

En lo meramente deportivo, ambos pilotos encaran 2018 con el difícil objetivo de destronar a Marc Márquez, tras un 2017 en el que el español fue tercero de la general, a 68 puntos del campeón y con tres victorias en su haber, y el italiano acabó quinto a 90 puntos y con un único triunfo.

El título es el objetivo de ambos y para ello dispondrán de una Yamaha M1 que el curso anterior sufrió más de la cuenta con los cambios de los Michelin con la temporada en marcha y que en muchas ocasiones fue superada por las satélites del Tech3.

El primero en tomar la palabra en el acto de presentación ha sido Kouchi Tsuji, presidente de Yamaha Motor Racing que dejó bien en claro que su único objetivo es “ser campeones del mundo”.

Rossi, que afrontará su decimonovena temporada en MotoGP, se mostró en forma y tan ilusionado como siempre: “Es más o menos igual cuando toca empezar por estas fechas. Lo que quiero es disfrutar de montar en moto, con más experiencia y eso debe ayudar a solucionar los problemas que vayan surgiendo durante las carreras”.

Sobre los inminentes test de pretemporada: “Son muy importantes porque puedes entender lo que va a pasar durante la temporada. En ella puedes mejorar la moto trabajando mucho, pero los test son muy importantes. El pasado invierno no fue el mejor para mí y para el equipo. Hay que trabajar en la electrónica, en todos los pequeños detalles, y en entender los neumáticos, que pueden ser la clave de la temporada”.

Luego fue el turno de Maverick: “He entrenado duro en invierno y estoy más en forma que nunca”.  “Yamaha es como estar en una familia, donde hay muy buen feeling con el equipo y con la fábrica, compartiendo los mismos sentimientos. El objetivo es conseguir ser campeón”. Acerca de la presión, cree que “la presión es siempre positiva, pero el objetivo es llegar preparado a la primera carrera, pelear por el podio en cada carrera y luchar por el título. He intentado llegar mejor preparado que en 2017 y hay que mejorar en varias áreas con la experiencia del año pasado”. Incidiendo en la presión, asegura que “la de este año es similar”.