Tras 21 años, sigue siendo un misterio la desaparición de un niño en el monte Tras 21 años, sigue siendo un misterio la desaparición de un niño en el monte
La historia parece salida de un cuento. Corría noviembre del año 1995, cuando Domingo Guillermo Gómez de 4 años, se ausentó de su casa en el paraje San José hacia el monte. Pasados los minutos no volvía. Sus padres comenzaron a buscarlo sin resultados positivos. Oscurecía y la desesperación y la angustia iban ganando a los integrantes de la familia y sus vecinos.
Cuando se hizo de noche, algunos viajaron hasta la localidad de Herrera, a dar parte a la policía de la situación, en tanto que otros siguieron buscando.
Al amanecer del día siguiente, no sólo la familia rastreaba a Dominguito, sino también pobladores de Herrera, baqueanos de la zona, policías, canes y hasta un aviador añatuyense se sumó a la búsqueda por aire.
Fueron 28 días de intensa búsqueda. Nunca pudieron dar con el niño. Los rastros se perdieron a pocos metros de su casa. Y no se encontró nada más.
Muchas conjeturas se tejieron en torno al "changuito perdido" -así lo bautizaron en ese entonces y hasta Pastor Luna le dedicó un chamamé-. De que habían pasado unos cazadores y lo levantaron, de que algún animal lo había devorado, o que alguien lo encontró y lo crió en algún lugar.
Pasados los meses, la Policía habría encontrado restos de huesos. Pero para la familia nunca quedó acreditado si se trataba de huesos humanos o de algún animal.
Mensaje
Hace tres días, su familia que actualmente reside en la ciudad en Colonia Dora, recibió un mensaje de una vecina de la zona rural, que les anunciaba que "alguien se había comunicado con ella, y le manifestó que era Domingo, el que se había perdido, y del que habla el chamaré".
También el anónimo habría manifestado que quería conocer a sus hermanos, y que se había enterado de la historia hace unos pocos meses, y que unos cazadores lo habían llevado hacia Buenos Aires donde lo criaron.
Familia
En entrevista con hermanos de Domingo, indicaron que descreen de la versión, porque no sería la primera vez que alguien se comunica o envía mensajes diciendo que es el "changuito perdido".
"Para nosotros es un misterio lo que pasó con mi hermano. De vivir, él tendría 26 años. No creemos que sean ciertos los comentarios que nos llegaron. Incluso en una radio habrían llamado diciendo que era él y que querían contactarse con nosotros. Pero nada. Mi madre murió dos meses después de que él se perdió, y mi padre hace algunos años atrás. No vamos a negar que en nosotros existen momentos en que pensamos qué habrá sido de él, si estará vivo o no. La Policía encontró restos un tiempo después, pero nunca supimos si eran de él o no", indicó José Gómez.
Las próximas horas serán fundamentales para conocer el desenlace del misterioso mensaje que les llegó a los Gómez.