Las tropas iraquíes descubrieron una nueva masacre del Estado Islámico contra seis familias Las tropas iraquíes descubrieron una nueva masacre del Estado Islámico contra seis familias
MOSUL, Irak. La policía federal iraquí recuperó los cadáveres de seis familias que murieron por la explosión de bombas colocadas por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) contra los civiles que intentan huir de los combates en el casco antiguo de la ciudad septentrional de Mosul.
En total, 17 civiles, integrantes de seis familias, entre los que se encuentran niños, mujeres y ancianos, murieron por estas bombas, enterradas en las calles estrechas en la entrada del casco antiguo, en la zona de Ras al Yada, según dijo a EFE uno de los supervivientes.
Los cadáveres estaban esparcidos por la calle desde hace una semana sin que las fuerzas iraquíes los pudieran recuperar debido a los feroces combates que se desarrollan en la zona.
Husein contó que una anciana salió corriendo cuando huían las familias hace una semana y pisó una bomba enterrada en una callejuela de Ras al Yada.
Este hombre, que perdió a sus padres y sus tres hermanos, relató que después de la explosión, regresó a su casa, que estaba "derrumbada" y se quedó entre los escombros "casi una semana".
Ahora pudo recuperar los cadáveres de sus familiares, una vez que las tropas lograron tomar la zona, en su lento avance contra los terroristas.
Según cálculos oficiales, 400.000 civiles de Mosul siguen atrapados bajo dominio del EI, en la ciudad más poblada que ha estado bajo el control de los yihadistas.