Odisea de dos hermanitas, violadas por el primo y alimentadas con comida para animales Odisea de dos hermanitas, violadas por el primo y alimentadas con comida para animales
Las penurias, hambruna y años de vejaciones sexuales en 2 de 6 hermanitas huérfanas de madre, por estos días shoquean a un tribunal que juzga al primo del sexteto, acusado de perpetrar las calamidades sexuales, mudándolas de la cama al baño. Al desandarse cada capítulo de la historia, el expediente sostiene que el escenario fue Monte Quemado y, en forma precisa la casa de la tía paterna de los hermanos. En teoría, ésta debía cuidar a los niños (desde hace 4 años), mientras el padre trabajaba en los obrajes Su esposa había muerto al dar a luz el último hijo.
Trampa de lobos
Una noche, la nenita de 8 años fue arrancada de la cama e ingresada en el baño. Ella no entendía nada por qué el primo le tapó la boca, trascendió.
Con el tiempo, debió resignarse que cuando él quisiese tenía la libertad de bajarle la bombachita y hacer de ella lo que quisiera. Nadie escuchaba su llanto en las madrugadas. Ningún familiar sospechó nada, pese a que en la casa vivían otros siete adultos.
Al poco tiempo (año 2010), el primo también incluyó en sus tropelías sexuales a la primita de 10.
Orfandad y violencia
Mientras tanto, los otros 4 niños tampoco la pasaban mejor. Caminaban de "puntitas de pie", forzados por gritos, insultos y recriminaciones por no aportar nada al sustento.
Lo novedoso: la tía habría incorporado en los almuerzos de sus 6 sobrinos, comida para perros. La dieta de sus hijos era una excepción.
Una mañana, la maestra escuchó el calvario de boca de una niña. En horas, alertó al padre y éste volvió del campo furioso. Retiró a sus hijos y los alojó en el refugio de Catalina Hornos (Añatuya), a cargo del hogar "Haciendo Camino".
Allí, una psicóloga advirtió los destellos de abusos y, después, un médico lo confirmó.
Procedimientos
A la semana, el juez José Luis Torrelio y la ex fiscal Ana María González mandaron tras las rejas al primo, por "abuso sexual con acceso carnal reiterado".
Hoy, es juzgado en la Capital y corre el riesgo de recibir penas de hasta 15 años.
También estuvo detenida la madre del adolescente, pero las pruebas no habrían resultado contundentes y fue separada del proceso, con el tiempo.
Su hijo enfrenta a tres jueces y en la primera jornada del juicio prefirió abstraerse de declarar.
Ahora, los vocales analizan una Cámara Gesell, declaraciones de testigos, médicos y psicólogos.
Los alegatos y sentencia se ventilarán en pocos días.