El elenco del Bajo Flores tuvo su festejo en la cancha de Instituto donde no dejó pasar la oportunidad de quedarse con el segundo ascenso.
Deportivo Riestra hizo historia: jugará en Primera al ganar el Torneo Reducido Deportivo Riestra hizo historia: jugará en Primera al ganar el Torneo Reducido
Deportivo Riestra logró ayer su primer ascenso a la máxima división de la AFA, luego de vencer a Deportivo Maipú de Mendoza por 1 a 0 en la final del Reducido de la Primera Nacional.
El delantero Gustavo Fernández, de cabeza a los 15 minutos del segundo tiempo, marcó el gol de la consagración en el estadio de Instituto de Córdoba, escenario neutral de la definición.
También te puede interesar:
Riestra, un pequeño club fundado en el barrio de Pompeya hace 92 años, jugará el año próximo en la Liga Profesional (LPF), en lo que será su primera experiencia en la élite del fútbol argentino.
En toda su historia, los "Malevos" militaron 26 temporadas en la Primera D, 43 en la Primera C, 4 en la Primera B y apenas 5 en la Primera Nacional, tras su debut en la campaña 2017/2018.
En los primeros 20 minutos de acción, Eric Tovo y Jonathan Goitía tuvieron el 1-0 en sus cabezas y Walter Acuña contó con otra clara oportunidad en sus pies, bien conjurada por el arquero Cozzani en una rápida salida.
Riestra se paró con una línea defensiva de cinco, dos mediocampistas centrales bien plantados y tres delanteros afilados, con "Cachete" Acuña más retrasado para engancharse en la zona de elaboración.
Maipú evidenció dificultades para generar acciones ofensivas. Controló el balón el 54% del tiempo, pero sin progreso en el campo para incomodar a Ignacio Arce.
En el segundo tiempo, cuando el desarrollo del juego expresaba una paridad más visible, Riestra consiguió la apertura del marcador con pelota detenida, su especialidad.
Acuña lanzó un centro pasado desde el sector izquierdo del ataque y Fernández, afirmado en el suelo, conectó de frente al palo más lejano, sin que el arquero pudiera reaccionar a tiempo.
Tras el 1-0 comenzó un partido diferente, muy cortado, plagado de interrupciones, adaptado a la necesidad del ganador. El árbitro Herrera fue benévolo para permitir algunas demoras y poco riguroso con los cinco minutos agregados sobre el final.
Antes del final, Maipú empujó con vergüenza y dispuso de ocasiones más claras para llegar al gol, pero halló la forma de vulnerar la valla del experimentado Ignacio Arce.