Dolar Oficial: - Dolar Blue:- Dolar CCL:- Dolar Bolsa: - Dolar Mayorista: -

EL LIBERAL . Espectáculos

El mal de Parkinson atraviesa una conflictiva relación en "Elena sabe"

08/11/2023 06:00 Espectáculos
Escuchar:

El mal de Parkinson atraviesa una conflictiva relación en "Elena sabe" El mal de Parkinson atraviesa una conflictiva relación en "Elena sabe"

La película "Elena sabe" es una de las producciones argentinas incluidas en la Competencia Internacional de la 38va. edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata y su directora, Anahí Berneri, habló con Télam sobre los desafíos de adaptar la novela homónima de Claudia Piñeiro.

El filme tiene como protagonista a Mercedes Morán, que compone con total verosimilitud a una Elena con un cuerpo que apenas le responde y sus facultades mentales en deterioro por la enfermedad del Parkinson y que, sin embargo, inicia un amargo recorrido en busca de pistas para encontrar al responsable de la muerte de su hija Rita (Érica Rivas), quien falleció inesperadamente.

También te puede interesar:

Los temas que generaron el interés de la directora fueron "la maternidad, pero también la maternidad a partir de ese momento que como hija pasás a ser la madre de tu madre", según cuenta. "Por otro lado, el deterioro físico por el Parkinson me permitía contar un cuerpo", completa la directora.

Con breves flashbacks que dan cuenta de la tortuosa relación madre-hija, el relato abre interrogantes sobre la maternidad y la culpa, con una Elena enferma y con la mirada hacia abajo, que no le permite ver normalmente y, sobre todo, mirar hacia su propio interior.

Luego de su paso por Mar del Plata, "Elena sabe" se estrenará comercialmente el 16 de noviembre y desde el 24 se verá en la plataforma Netflix.

¿Qué fue lo que te interesó de la novela de Claudia Piñeiro para llevarla al cine?

Me convocó para el proyecto Vanessa Ragone y la verdad es que cuando leí la novela sentí que había temas que me interpelaban, una es la maternidad, pero también la maternidad a partir de ese momento que como hija pasás a ser la madre de tu madre, y por otro lado, el deterioro físico por el Parkinson me permitía contar un cuerpo, que es una de las cosas que más me gustan y que más me desafían.

El libro me conmovió y también me reí mucho, porque el personaje de Elena incomoda a todos con su sinceridad, con su falta de filtro, es una mujer que dice lo que piensa. Todo eso genera conductas raras en los demás personajes, incluso de los que quieren ayudarla en su aparente debilidad y quedan incómodos, porque Elena no es débil. Todo eso hace que la película tenga momentos en tono de comedia.

El filme habla de temas la enfermedad, la vejez y el deterioro físico, pero el centro es la relación entre una madre y su hija.

Sí, es el tema central. Es una relación bastante disfuncional con una madre que ha sido profesional, de una generación donde ser fuerte implicaba despreciar la vulnerabilidad ajena y sobre todo la de una hija mujer, un mandato que decía que había que ser fuerte. Desde el presente, decimos que hay que ser vulnerable porque es la manera de empatizar con el otro. Elena cree saberlo todo pero ella es el producto de una generación de mujeres que para lograr lo que querían tuvieron que ser más fuertes que los tipos y aborrecían verse identificadas en mujeres que no hacían lo mismo que ellas.

¿Cuáles fueron los desafíos de adaptar la novela al cine?

La novela tiene algo de un falso thriller que devela muy rápidamente lo que sucedió; y el camino, aquello que se investiga, es el proceso del personaje de Elena por encontrar una respuesta sobre la muerte de su hija. En la adaptación, fue trabajar con el cambio de tiempo del relato, porque en el libro es un viaje en tren donde hay recuerdos de esa madre y eso era difícil de trabajar desde el cine; difícil y aburrido para una película, porque lo que funciona perfectamente en la novela a nosotros no nos servía. Por eso decidimos trabajar el tiempo previo a la muerte de Rita hasta el momento en que Elena hace al viaje. Trabajamos una estructura circular intentando con algunos flashbacks mantener una continuidad espacial, es decir, los recuerdos ocurren en los mismos espacios del presente que habita Elena y su duelo le trae esos recuerdos de su hija, que se hace presente en ese mismo lugar.

¿Cómo fue el trabajo con Mercedes Morán para lograr esa caracterización con el Parkinson?

Lo que hicimos con lo físico fue convocar a un neurólogo especialista en Parkinson que nos acompañó en la construcción del personaje de Elena y también con la coreógrafa Diana Szeinblum, un trabajo hermoso.

"Elena sabe" es una película poblada por mujeres, con las actuaciones de las hijas de Morán y Rivas.

Convocamos a Mey (Scápola) con la idea de que tenía que hacer a Isabel, primero porque es una gran actriz, pero además, pensamos quién mejor que la propia hija de Mercedes Morán para decirle las cosas tan crueles que le dice a su personaje, Elena.

Con respecto a Érica (Rivas), teníamos que encontrar a alguien para que la hiciera cuando era adolescente y enseguida nos apareció la idea de Miranda (De la Serna), que es muy parecida físicamente a su madre, tiene la misma voz y también es una tremenda actriz.

Lo que debes saber
Lo más leído hoy