Denunciado por abuso de sobrina nieta, un vecino de Árraga huyó al monte y se colgó

Un individuo fue descubierto ayer sin vida pendiendo de un alambre sujetado a un árbol, siete horas después de haber sido denunciado por sus familiares y acusado de haber abusado de una sobrina nieta, de 12 años, mientras sus padres y tíos participaban del velatorio del ciclista que fuera atropellado el martes a la mañana.

El escenario del luto y la increíble derivación fue un barrio de Árraga, departamento Silípica. De acuerdo con la presentación ante las autoridades policiales, en un mismo predio residían varias familias compuestas por adultos, adolescentes y niños. En una habitación, en soledad, vivía el tío abuelo de la menor.

El luto por la tragedia de un ciclista habría reunido a numerosas personas. Una de ellas, fue la familia de la nena, cuyo cuidado habrían asignado al tío abuelo, señalaron los voceros policiales.

Cerca de la medianoche del martes, los adultos habrían retornado del servicio fúnebre. En minutos, la menor habría confiado a sus progenitores que el tío abuelo la habría forzado a que le tocara sus partes íntimas.

De pronto, todo se transformó en bronca, gritos, acusaciones y un escándalo con efectos multiplicadores, al cual se habrían plegado numerosos vecinos.

Con los ánimos exaltados, se habrían alzado algunas voces de cruda protesta, resueltas en "hacer justicia por mano propia". Las fuentes indicaron que muchos querían lincharlo, confió también un vocero policial.

Mientras el tío abuelo se escapaba y se internaba en el monte, los padres de la menor corrieron a la comisaría local y estamparon su firma en la denuncia. Después, todos se fueron a dormir y al despertar ayer los sobrinos advirtieron que el tío abuelo sospechoso no habría regresado a su habitación.

Partieron en su búsqueda y lo encontraron colgado a 80 metros de la vivienda. Sobrevino otra investigación, a cargo de la fiscal Luciana Jacobo. La autopsia habría confirmado suicidio por ahorcamiento, enfatizaron los expertos al cierre.