A los 75 años, Cortese se estrena como directora

Rita Cortese es una de las grandes actrices que tiene la Argentina y que en los últimos años sorprendió por mostrarse en nuevas facetas. Se metió más de lleno en la música y hoy disfruta de sus shows de Tango, pero además a sus 75 años dirige por primera vez la obra teatral "No tiene un desgarrón", con Julieta Cardinali y Vera Spinetta como protagonistas.

Figura del espectáculo argentino, Rita Cortese se alzó con tres Premios Martín Fierro por sus actuaciones en algunas de las ficciones más populares del país como "El sodero de mi vida", "Sin Código" y "Lalola", pero no le quita el sueño este tipo de reconocimientos: "Yo no creo en los premios. El arte no tiene que ver con el sistema. El arte es el arte, el arte es insondable y yo creo en el arte. No me gustan las ceremonias, no me gustan los premios, soy media fóbica en eso", contó durante una entrevista con Noticias Argentinas.

Y habló sobre su incursión en la música: "Lo de la música hace ya muchos años que lo vengo haciendo y me hace muy feliz. Porque además tengo mucha palabra, tengo una conexión con el público muy grande y me hace muy feliz cantar, aunque yo no me siento una cantante. Canto y a la gente le gusta y tengo buena respuesta, pero sí, siempre me siento una actriz cantando. Es como mi sello", aseguró la actriz, que se animó hace varios años y ahora continúa haciendo shows de Tango.

Sin embargo, lo que sí es algo nuevo para Rita es la dirección teatral: "Ahora estoy en teatro, la dirección es algo que me atrae muchísimo. Me encanta, me hace muy feliz".

Si bien reconoce que no hay mucha propuesta desde lo audiovisual, en este momento Rita Cortese aparece en la película "Los domingos mueren más personas" y en la serie "El mejor infarto de mi vida" (basado en un cuenta de Hernán Casiari), ambas disponibles desde las plataformas.

"No me parece mal. Lo único que me da dolor es que se pierda la presencialidad. Porque terminamos todos encerrados en las casas mirando las películas o las series, a veces solas o solos, o si no, en matrimonio y todo chiquitito. Entonces es muy difícil la empatía, generar empatía, se pierden los cuerpos, se le tiene mucho miedo al otro. En lugar de generar una posibilidad de encuentro para transformar algo, el otro pasa a ser un peligro porque además venimos de una pandemia donde el otro podía ser muerte o contagio en lugar de una posibilidad de salida. Y así nos fuimos encerrando", analizó.

Cortese lamenta que no haya ficciones en televisión: "No hay nada, hay juegos, no pensamiento. La televisión de aire hay que pensarla en una situación económica tan dura y tan extrema como la que se está viviendo en este momento, a pesar de lo que diga el Presidente de la Nación, la verdad que en lo cotidiano no es verdad. Hay mucha gente que ya ni siquiera puede pagar un cable, que ese dinero lo destina para una cosa más esencial. Y se queda con los canales de aire. Esa es la realidad que estamos viviendo, después podemos guitarrear lo que quieras".

Al ser consultada sobre el trabajo de sus colegas, Cortese consideró que la situación "es muy difícil. Lo único que está sosteniendo en este momento a los actores es el teatro y también la movida musical que es muy grande, es la posibilidad del sustento que tenemos los actores en este momento".