La Región Albigasta tiene déficit hídrico y alerta a la ganadería

FRÍAS, Choya (C) La Agencia de Extensión Rural del INTA, establecida en la delegación Frías, formuló un informe sobre cómo está actualmente la producción agropecuaria del sudoeste con impacto en la llamada Región Albigasta.

Precisa el relevamiento que en los mapas de precipitaciones de enero, en la zona de Frías, se registraron aproximadamente 90 mm, mientras que en el departamento Choya alcanzó los 100 mm y un poco más en Guasayán.

"Somos conscientes del comportamiento irregular de las lluvias estivales, con registros dispares dentro de la misma región", explicaron desde la AER y agregan: "En algunos sectores de Choya, las precipitaciones de enero fueron de sólo 70 mm. y en febrero se registraron apenas 30 mm; esto significa que los registros de lluvias para lo que va del año en Choya ha oscilado entre un acumulado de menos de 100 mm. en algunos casos hasta unos 150 mm. en otros establecimientos".

Debe repuntar

Los especialistas explicaron que "estos datos reflejan un 40% menos de lluvias en comparación con los valores normales para la época". Es más, "esta tendencia se profundizó en febrero, donde sólo se registraron tres días con precipitaciones, totalizando 79 mm en Frías, mientras que en otros puntos de la región la cifra fue más baja, de 30 mm".

A este déficit hídrico se suma un periodo de temperaturas elevadas, con semanas continuas de calor intenso, con poca amplitud térmica y sin precipitaciones, incluso con algunos eventos de temperaturas extremas.

Explicaron: "Con precipitaciones por debajo de lo normal para la zona y condiciones de evaporación de humedad en superficie y de transpiración de los cultivos resultan condiciones agrometeorológicas críticas para la producción agropecuaria de la región".

Preocupación 

Ante el panorama de déficit hídrico, se mantuvo un intercambio de información con la Sociedad Rural y el Grupo CREA Semiárido Norte. "En diálogo con el Ing. Agr. Adrián Llorvandi, presidente de la Sociedad Rural de Frías, se evidenció la preocupación general de los productores por el deterioro de las pasturas". 

Luego de una primavera favorable que dejó un buen perfil de humedad en el suelo, la falta de lluvias y las altas temperaturas en los meses estivales han detenido el crecimiento y disminuido la calidad del forraje disponible.

"Durante estos días, precipitaciones torrenciales se desarrollaron en distintos lugares del norte argentino y el descenso de temperatura resulta un alivio para nuestra zona, sin embargo en el acumulado de precipitaciones estival, este aporte resulta insuficiente aun", explica la AER.

De persistir estas condiciones y no registrarse precipitaciones significativas en el corto plazo, la región ingresará a la estación seca en una situación crítica para la ganadería. Los productores advierten que "la situación está más complicada de lo que todo el mundo cree". 

Decisión 

A la espera de lluvias, se abre la posibilidad de siembra de forraje, para generar alternativas para la alimentación del ganado y también para la recuperación de los lotes de pastura.

En reuniones recientes, los productores ganaderos de la región han definido estrategias de manejo basadas en balances forrajeros de sus lotes. Como medida de emergencia, han evaluado la reducción de carga animal de los establecimientos, priorizando la retención de los animales jóvenes y la venta de categorías más grandes o improductivas. 

Los animales más jóvenes necesitan menos alimento en el caso de ser necesario suplementar alimentación y brinda la posibilidad de empezar la siguiente temporada con animales nuevos con mayor posibilidad de desarrollo y productividad. 

Una medida de este tipo es considerada de emergencia y repercutirá en la economía de las empresas agropecuarias y en las cabezas de ganado de la zona. El margen para tomar estas decisiones es hasta fines de marzo. Si la oferta forrajera no mejora, sin duda la solución más viable es reducir la carga animal para lograr un equilibrio al interior de los predios. Reducir la presión sobre los lotes permitirá una mejor recuperación de las pasturas y garantizará alimento para el ganado restante.