Dolar Oficial: - Dolar Blue:- Dolar CCL:- Dolar Bolsa: - Dolar Mayorista: -

EL LIBERAL . Santiago

Los grandes colegios de Santiago del Estero

Por Eduardo Lazzari. Historiador.

09/03/2025 06:00 Santiago
Escuchar:

Los grandes colegios de Santiago del Estero Los grandes colegios de Santiago del Estero

HACÉ CLICK AQUÍ PARA UNIRTE AL CANAL DE WHATSAPP DE EL LIBERAL Y ESTAR SIEMPRE INFORMADO

La iniciación del ciclo lectivo a principios de cada año se ha convertido en un ritual cívico que pone de manifiesto las mejores virtudes de la sociedad argentina, que a pesar de las dificultades y los inconvenientes de los tiempos que corren, sigue apostando al futuro enviando sus hijos a la escuela para forjar un destino acorde a los sueños de los padres fundadores de la Patria, los padres constituyentes de la República y de todos los hombres y las mujeres de buena voluntad que habitan el suelo bendito de la Argentina.

Es la razón por la que dedicaremos esta columna dominical a las grandes instituciones educativas de Santiago del Estero, disculpándonos desde ya porque toda elección significa dejar de lado a otras organizaciones escolares que sin duda merecen ser consideradas. Desde los albores de la educación pública argentina, la "Madre de Ciudades" fue considerada por el Estado nacional para la consolidación de grandes escuelas y colegios que son orgullo hoy para todos los santiagueños.

También te puede interesar:

El Colegio Nacional

El presidente Domingo Faustino Sarmiento, apenas iniciado su período de gobierno, por un decreto del 5 de marzo de 1869 crea el Colegio Nacional de Santiago del Estero, provincia gobernada por entonces por Manuel Taboada, y se lleva adelante la empresa a pesar de las divergencias políticas entre los dos próceres. Quedaba claro, así que la educación pública estaba por encima de las discusiones partidarias. También eran fundados en esos días los colegios nacionales en San Salvador de Jujuy, Corrientes, La Rioja y San Juan. 

Rápidamente, son designadas las autoridades: el rector Juan Milburg, un austríaco que había estudiado en la Universidad de Heidelberg, quien llevaba varios años en el país dedicado a la organización de las nuevas escuelas; y el vicerrector Francisco Malbrán. Las primeras instalaciones de la novel escuela fueron ubicadas en la antigua casona de Juan Felipe Ibarra, que a la sazón había sido también el edificio de la gobernación, en las actuales Avellaneda y 25 de Mayo. Para adecuar la construcción a las nuevas necesidades educativas, fueron contratados Nicolás y Agustín Cánepa, quienes posteriormente levantarían la iglesia matriz de Santiago del Estero, hoy catedral primada de la Argentina. 

Los cursos comenzaron con una gran cantidad de alumnos y el concurso de profesores de gran nivel intelectual. Al año siguiente se crea la Biblioteca del Colegio y en 1874 se anexa la Quinta Normal como establecimiento dedicado a formar capataces para la agricultura. El progreso económico y social generado por los gobiernos liberales de la Generación del 80 hizo que se dedicara una manzana limitada por las calles Sáenz Peña, Moreno, Libertad y Misiones para la construcción de un colegio palacio, cuyo proyecto fue diseñado por el arquitecto Francisco Tamburini, autor de la consolidación de la Casa Rosada y del Teatro Colón de Buenos Aires. 

El 12 de octubre de 1908 fue inaugurado el nuevo Colegio Nacional durante la presidencia de José Figueroa Alcorta y la gobernación de José Santillán. Asistieron el ministro nacional de Instrucción Pública, Rómulo Naón y el rector era Baltasar Olaechea y Alcorta. Vale destacar que hasta 1936 solo podían acceder al Colegio los varones, y es la razón para la anexión del Liceo Nacional de Señoritas, fundiéndose ambas instituciones en 1972, convirtiéndose desde entonces en mixto el dictado de clases. En 1945 le fue impuesto al Colegio Nacional el nombre del antiguo gobernador Absalón Rojas. El 13 de agosto de 1997 fue declarado monumento histórico nacional por la ley 24.866. 

Fue transferido a la provincia de Santiago del Estero y hoy se encuentra bajo la órbita del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología. A principios del siglo XXI el edificio fue sometido a una prolija restauración y equipamiento pedagógico moderno, siendo inauguradas las obras en 2021. Luego de más de 150 años, el Colegio Nacional sigue siendo una de las instituciones educativas más relevantes del norte argentino.

La Escuela Normal

El origen de esta señera institución de Santiago del Estero surge de la creación de una escuela superior para niñas por parte de la Junta Central de Instrucción Pública de la provincia, para lo cual se adquiere un terreno que hoy es ocupado por el Ministerio de Educación, en el complejo Juan Felipe Ibarra, sobre la calle 24 de septiembre. Fue bautizada Escuela Belgrano, una muestra más de la admiración de los santiagueños por el prócer creador de la Bandera. 

La ley nacional 758, promulgada el 13 de octubre de 1875 por el presidente Nicolás Avellaneda, habilitó al gobierno nacional a sufragar la instalación de una escuela normal en cada capital de provincia, siempre y cuando el gobierno local lo solicitara. El gobernador Gregorio Santillán inicia los trámites poniendo a disposición de la Nación el edificio de la Escuela Belgrano. El 25 de agosto de 1880 Avellaneda funda la Escuela Normal Nacional de Maestras de Santiago del Estero, nombrándose a Juana Pérez como directora. El plantel docente incluía una vicedirectora y seis maestras, comenzando a dictarse las clases el 9 de mayo de 1881 con la asistencia de 276 alumnas. Era gobernador Pedro Gallo y una de las primeras educadoras era Francisca, la hija del legendario rector del Colegio Nacional de Buenos Aires, Amadeo Jacques. En 1884 se graduaron las primeras cinco maestras normales de Santiago del Estero.

La Escuela Normal fue la cantera de la que surgieron miles de maestras que cubrieron todas las escuelas primarias de las provincias, y vale destacar que el llamarlas "señoritas" se debe al hecho que los reglamentos laborales a principios del siglo XX establecían que no debían casarse para ejercer la profesión. En 1947 se incorpora el profesorado superior a la institución, iniciándose un nuevo ciclo en la historia de la educación santiagueña. En 1953, siendo presidente Juan Domingo Perón y gobernador Francisco Javier González, la Escuela Normal se traslada a su actual edificio sobre la calle Independencia frente a la plaza Sarmiento, donde funciona hasta la actualidad. En 1992 fue transferida la institución a la órbita provincial y luego de un largo proceso de restauración, remodelación y equipamiento, fueron inauguradas las obras durante 2024.

La Escuela del Centenario

Para la conmemoración del Centenario de la Revolución de Mayo el Congreso Nacional dicta en septiembre de 1908 la ley 6286 que ordena en su inciso 12 "construir en las ciudades de La Plata, Santa Fe, Santiago del Estero, Catamarca, San Juan, Paraná y Corrientes, un edificio monumental destinado á escuela primaria superior para un mínimum de cuatrocientos cincuenta alumnos y un máximum de setecientos, dotado de local para gimnasia, biblioteca pública y sala de conferencias; debiendo adoptarse un tipo arquitectónico uniforme y dedicarse al "Centenario de la Independencia Nacional 1810-1910". Estos edificios serán construidos en parques ó manzanas, completamente aislados y se entregarán en propiedad a la respectiva provincia". . En los considerandos se establece la construcción de una escuela palacio, con el objetivo era mostrar los ideales de nacionalismo y progreso. Fueron encomendados los planos al arquitecto francés Joseph Gire y al ingeniero mendocino Juan Molina Civit, y la curiosidad es el modelo levantado en Santiago del Estero se repitió en Parána. Como curiosidad, Gire y Molina Civit construyeron en Buenos Aires el edificio que fuera residencia presidencial y hoy sede de la Conferencia Episcopal Argentina. 

Para la construcción se eligió una gran porción de la manzana limitada por las calles Belgrano, Rivadavia, Misiones y Andes, y allí se elevó un edificio de características extraordinarias, tanto por su calidad constructiva como por el diseño de sus instalaciones. Fue inaugurado durante 1916, siendo gobernador de Santiago del Estero, Antenor Álvarez y presidente argentino Victorino de la Plaza. El palacio educativo constaba dependencias administrativas, una biblioteca coronada por la cúpula que caracteriza al edificio, un paraninfo (auditorio) de características monumentales, un patio para ejercicios físicos (poco común en esos tiempos) y dos alas en las que se encontraban las aulas para los centenares de alumnos. 

La fachada, que sigue siendo una de las más bellas e imponentes de la ciudad, está inspirada en el estilo secesión vienés. Una vez iniciadas las actividades la escuela se convirtió en un símbolo de la modernidad en Santiago y en la década de 1930 parte de sus dependencias se convirtieron en el repositorio de la grandiosa colección arqueológica de los hermanos Emilio y Duncan Wagner, dos próceres de la ciencia argentina poco valorados en el país, pero como corresponde mucho en Santiago. Al cumplirse los cien años de la erección de la Escuela del Centenario, el edificio fue finamente restaurado en su faz decorativa y adaptado a las nuevas necesidades pedagógicas, constituyendo hoy un orgullo para los santiagueños. 

Lo que debes saber
Lo más leído hoy