Acusó a un efectivo del Servicio Penitenciario de acosar a una adolescente

Natalia es una joven madre del barrio Villa Nueva de La Banda que desde hace más de cinco meses vive en constante alerta ya que su hija, una adolescente de 17 años es hostigada y acosada por un efectivo del Servicio Penitenciario, quien sería novio de su vecina.

En diálogo exclusivo con EL LIBERAL, Natalia se mostró angustiada por no saber qué más hacer ya que teme por la integridad de su hija y el acusado —quien actualmente cumpliría funciones en el penal de Los Telares— incumplió siempre las órdenes de la Justicia.

"Esto comenzó en el mes de octubre cuando mi hija me comenta que él (por el acusado) empezó a seguirla, cuando ella iba al colegio nocturno, la interceptaba en la calle y le pedía que suba al auto que la acercaría, pero que no me dijera nada a mí", comenzó Natalia.

Según expresó la mujer —que trabaja como empleada de un salón de eventos— cuando me presenté en la Comisaría del Menor y la Mujer me dijeron que no me podían tomar la denuncia. Fui a la Fiscalía y allí ellos me dieron un papel para que en la Seccional 13 lo hagan".

"Contó que en ese momento, el acusado sorprendió a la menor en la calle e intentó meterla en el auto", sostuvo Natalia quien remarcó que allí tomó intervención la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual.

"Él tiene dos hermanos policías y como nosotras solo sabíamos su nombre y que residía en Los Romanos, lo hicieron notificar de las medidas a través de sus hermanos", contó la entrevistada.

Molesta, Natalia expresó: "A los cinco días de este hecho violó las medidas. Su novia reside en una casa contigua a la mía y vino aquí como si nada, sabiendo que no podía acercarse a 300 metros de mi hija".

Según contó la mujer, la adolescente se vio intimidada nuevamente por el guardiacárcel. "Trataba de tranquilizarla diciéndole que a lo mejor no había recibido la notificación de la policía. Después pasaron más o menos diez días y otra vez la interceptó cuando mi hija cruzaba la avenida Libertador para venir a nuestra casa".

"En ese momento, él venía de frente hacia ella y como que amagaba con tirarle el auto. Cuando ella me cuenta eso otra vez llamo a la policía. Ellos (por los uniformados) lo llaman y le dicen nuevamente que tenía prohibido acercarse a mi casa, que ya tenía una denuncia", sostuvo.

Indignada remarcó: "No hizo caso en nada. Como mi hija no tenía celular comenzó a enviarme mensajes a mí diciéndome si no quería que fuese mi yerno. Le aclaré varias veces que mi hija era menor de edad, pero me decía que no podía controlar lo que sentía por ella".

Una semana más tarde (ya en el mes de noviembre) cuando la menor "regresaba del colegio —al cual concurre en turno noche— lo encontró aquí en la esquina de mi casa. Él bajó la ventanilla del auto y la escupió, mientras estaba con su novia. Mi hija llegó enojada a casa, en crisis, preguntándome si iba a tener que aguantar esta situación".

Natalia, una vez más recurrió a la Justicia y lo denunció: "Cuando la Fiscalía intervino, me dijo que no había delito. Le explico que él ya tenía una restricción, la cual estaba en vigencia porque era por 90 días, pero no me dieron respuesta".

Cansada de que el acusado siguiera a la menor a cada lugar que va y sin recibir respuesta alguna, se presentó la semana pasada en el centro judicial bandeño. "Hablé con el fiscal de delito común que tenía la denuncia que realicé por violar las medidas y me dijo que la causa iba a ser archivada".

Según contó Natalia, después también se entrevistó con la fiscalía que intervino en la causa por hostigamiento y "me dijeron que no podían hacer nada más así que al no obtener respuesta opté por hacer pública toda esta situación", sostuvo haciendo alusión a las publicaciones que realizó en su perfil de la red social Facebook.

"Mi hija tiene que volver al colegio ahora y yo no sé qué le puede pasar. No tenemos ningún medio de movilidad, ella va y vuelve sola y a pie. Él parece que no va a detenerse y yo temo por la integridad de ella", puntualizó.

"Me dijo que borre la publicación o lo iba a lamentar"

Según contó Natalia, durante la noche del miércoles luego de que hiciera público el calvario de su hija en redes sociales, el acusado —mientras se encontraba en compañía de su novia— la amenazó, y la denunció.

"Cuando salgo a la calle los cruzamos a ellos dos en el auto. Cuando me ven frenan y me dicen que más vale que borremos la publicación, porque yo me voy a lamentar, porque ellos saben de que mis hijos quedan solos cuando yo trabajo".

Ante esta intimidación, la joven madre nuevamente se presentó en la Comisaría 13 para denunciar lo ocurrido. "Cuando llegó a la policía me dice un oficial que estaba de guardia que en la mañana él me había denunciado y que había una orden de la Fiscalía para que me notifiquen a mí de que no puedo nombrarlo".

Presentó todas las evidencias 

La preocupada madre expresó que en la denuncia inicial que realizó por hostigamiento, presentó ante la policía todas las evidencias de que tales episodios sucedían. "Él venía borracho, en auto a la casa de su novia, donde hay un descampado de un predio, y si nos veía en la vereda se cruzaba a orinar enfrente".

Además contó que presentó capturas de los mensajes que él le enviaba. "Como mi hija no tenía teléfono me escribía a mí. Tengo un audio también adonde él me dice que la va a dejar a su novia si yo lo acepto a él, para que él se ponga en pareja con mi hija", remarcó.

"Me escribía '¿no quieres tenerme de yerno?'. Que le pasaban cosas con mi hija y que no las podía controlar. Le pedía que no se acerque más a mi hija porque él no sabía de lo que yo era capaz, pero nunca dejó de acosarla", puntualizó.

Antes de finalizar Natalia reveló: "Mi hija se va de mi casa y queda con su abuela cada vez que yo tengo que ir a trabajar porque no se qué le puede hacer él. Yo no quiero tener problema con nadie, pero quiero que esta situación termine y que mi hija tenga tranquilidad".