Se encontraban en un camión de matrícula paraguaya. Su valor estimado es de casi $780 millones.
La Aduana y GNA descubren un contrabando de más de 500.000 atados de cigarrillos La Aduana y GNA descubren un contrabando de más de 500.000 atados de cigarrillos
Un ciudadano paraguayo fue detenido en Formosa, luego de que un procedimiento de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) y la Aduana —dependiente de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA)— descubriera un exorbitante volumen de mercadería de contrabando durante un un control vehicular. El hombre conducía un camión con una carga no declarada de 546 mil atados de cigarrillos de origen extranjero.
El procedimiento tuvo lugar sobre la Ruta Nacional 11, en la localidad de General Mansilla, cuando la GNA detuvo un rodado de matrícula paraguaya para realizar un control documental. El conductor presentó un manifiesto que declaraba una carga de botas quirúrgicas con destino a Buenos Aires. Sin embargo, su código QR no arrojó resultados al ser escaneado, por lo que crecieron sospechas en torno a su autenticidad. La GNA contactó a la Aduana, que advirtió más discrepancias en la documentación y determinó que era apócrifa. Por ejemplo, el número de tránsito aduanero correspondía al año 2021. El vehículo fue trasladado a un predio de Gendarmería para una verificación física exhaustiva.
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Allí, personal de la Aduana cortó el precinto que aseguraba la carga y comprobó que, en efecto, la misma no consistía en elementos quirúrgicos sino, íntegramente, en más de medio millón de atados de cigarrillos de industria paraguaya.
La mercadería ilícita, cuyo valor estimado asciende a $779.142.000, fue incautada y puesta a disposición de la Justicia. Intervinieron el Juzgado Federal N° 1 de Formosa, a cargo de la Dra. Belén López Macé, y la Fiscalía Federal N° 1 de la misma provincia, en manos de la Dra. Marisa Vázquez, que ordenaron la detención del conductor y el secuestro del medio de transporte.
En términos del artículo 865 del Código Aduanero, al hombre podría caberle una pena de hasta 10 años de prisión.
