Apresan al "Gordo Curi" en causa por "facilitación de la prostitución" y rescatan a dos jovencitas

Enrique "el Gordo Curi" fue detenido ayer a la mañana en su domicilio particular, acusado de mantener cautiva a una jovencita, considerada presa sexual de un grupo de amigos del individuo, proclives a todo tipo de excesos en "banquetes de droga, sexo y rock", según la hipótesis de la fiscalía interviniente.

A las 7 de la mañana, efectivos del Departamento Trata de Personas y Delitos Conexos de la Dirección General de Investigaciones de la Policía de la Provincia allanaron una casa en calle Avellaneda al 400.

Arribaron con una orden de allanamiento refrendada por el juez de Control y Garantías con Competencia Penal y Juvenil, Gastón Merino (foto), dentro de una investigación por supuesta "promoción y facilitación de la prostitución", a cargo de la fiscal, Florencia Torres Cianferoni.

Una de las jóvenes halladas en la casa sería de 23 años, con residencia en el Bº Siglo XXI. De acuerdo con la denuncia de su familia, la habían visto por última vez el 31 de agosto.

La localización de la jovencita estaba a cargo de los efectivos de la División Búsqueda de Personas en conjunto con sus pares de la Comisaría Comunitaria Nº 5 de la Mujer y la Familia.

Cuatro semanas después de aquella denuncia por su paradero, una comisión policial detuvo un automóvil con el "Gordo Curi", procedente de la provincia de Córdoba. Se sospechó que la mujer había viajado con él a Córdoba. En aquella ocasión, el abogado, Martín Rojas (foto), lo "blindó" con un recurso de eximición de prisión.

Por las dudas, Curi desapareció del mapa santiagueño capitalino, al parecer refugiándose en un hotel alojamiento en la zona sur de la ciudad.

Familia, azorada

Temerosa de la suerte de su hija, al saber que sufre adicción a las drogas, su madre habría radicado una denuncia también en el Juzgado Federal, confiaron los voceros a EL LIBERAL.

Una alta fuente deslizó que meses atrás el "Gordo" habría protagonizado otro escándalo en un albergue transitorio en la zona de Solís y Santa Fe.

Una corriente policial señaló que ingresó con la misma joven, de 23 años, a una de las habitaciones. Según las fuentes, después habría arribado un amigo, resuelto en entrar a la pieza y también tener sexo con la chica. Ésta se opuso, estalló un incidente y el Curi zafó del procedimiento policial, al huir en su coche, siempre según fuentes policiales.

Cuando los funcionarios ayer coparon la casa del "Gordo", habrían encontrado a dos chicas: una con un bebé y la restante sería la joven del Siglo XXI. Fueron puestas bajo la tutela de médicos y psicólogos.

Al menos una tenía el fiel reflejo de haber pasado la noche entre sexo, alcohol y drogas. Los investigadores tomaron numerosas fotografías y "fajaron" puertas y ventanas con carteles de clausura.

Habrían hallado a una joven con su bebé en brazos

La segunda víctima tendría un bebé y la Fiscalía daría intervención al personal de la Subnaf en el caso. Los voceros confiaron que se encontraba con los sujetos desde hace dos días, como mínimo.

Como los policías hallaron a dos sujetos más, de apellidos Flores y Campoya, la jueza, Érika Casagrande (de turno, desde este sábado), refrendó una segunda orden de allanamiento.

El procedimiento se cumplió entre las 6 y las 11.30 de la mañana. Fueron secuestrados botellas, celulares y vestigios de drogas. La movida fue coordinada por las fiscales Torres Cianferoni y Victoria Ledesma, integrantes de la Unidad de lucha contra las drogas en Narcomenudeo.

Prima facie, quedaron detenidos, Curi, Mónica Montesino, Sebastián Flores y Víctor Campoya, por presunta "promoción y facilitación de la prostitución".

La música como fachada de fiestas con víctimas adictas

La Fiscalía acusaría al "Gordo Curi" de organizar en su casa "banquetes", en los que al parecer se consumía drogas y se practicaría sexo grupal.

En la práctica, habituaban reunirse amigos del ambiente del rock. A tal encuentro, eran invitadas chicas con fuerte dependencia a las drogas, algunas atraídas al parecer por Montesino, según la investigación de la Justicia.

Entre alcohol y música, los invitados solían pasar a encuentro sexuales, cuyas partícipes estelares serían las chicas jóvenes adictas.

Para la investigación, de la música todo decantaba en orgías con un todos contra una: de acuerdo con las sospechas, varios hombres pasaban a una habitación con una sola joven, casi siempre sin mínima noción del día o la noche.

Por ejemplo, la chica del Siglo XXI ignoraba si en el día debía ducharse, desayunar, o almorzar. Solo se conducía como una "zombie" y hasta dijeron los policías que "comía dormida".

La defensa priorizaría una internación o domiciliaria

La defensa de Curi, Martín Rojas, ahora tramita un pedido "de arresto domiciliario" o "internación en un centro privado de salud", ya que tendría fuertes síntomas de "abstinencia".

Pese al hermetismo reinante, trascendió que no se alimentaba desde el viernes y que el letrado anoche le habría entregado medicamentos para preservar el corazón del "Gordo".

Mal que le pese, el entorno de Curi no vio con malos ojos que haya sido detenido, por considerarlo una bomba de tiempo con su salud fragilizada y adentrado de lleno en las drogas.

Sin embargo, para que Rojas obtuviere luz verde, antes, o una junta médica debía asistir al acusado, revisarlo, diagnosticarlo y autorizar la domiciliaria.

La otra salida, imaginada, es que la contundencia del diagnóstico decidiera a un juez a alojarlo urgente cerca de un médico que lo monitoree. Hasta entonces, el "Gordo" Curi durmió anoche en el Centro Único de Detenidos.