Excarcelaron al sargento que mató a un ladrón en un forcejeo 

El sargento de la policía Sebastián Cogote (45), acusado de asesinar de un disparo durante un supuesto forcejeo a Jonathan "Paito" Rojas mientras estaba cumpliendo servicio adicional en la algodonera SIRLEX, fue excarcelado.

La medida fue dispuesta por el Dr. Carlos Ordóñez Ducca —juez de Control y Garantías de La Banda— luego de una audiencia que se llevó a cabo a las 10 de la mañana de ayer, en el Palacio de Tribunales bandeño.

Allí el Dr. Nicolás Santillán —fiscal a cargo de la investigación, junto a la Dra. María Alejandra Holgado— solicitó la prórroga de detención de Cogote, quien está acusado de homicidio calificado por su función de policía.

Según manifestó el representante del Ministerio Público durante el debate —que se extendió por varias horas— falta incorporar "prueba de vital importancia para el esclarecimiento del hecho como ser informes de Criminalística referentes a las pericias de las armas, casquillos y proyectil".

Además el Dr. Santillán sostuvo que hasta el momento no conoce los resultados de los levantamientos de rastros, o de la prueba stubs, entre otras que se realizaron la madrugada del 19 de septiembre en el interior de la algodonera, ubicada en el barrio Los Lagos.

Según entiende la Fiscalía, "se encuentran latentes los peligros procesarles", siendo uno de ellos el de fuga teniendo en cuenta la pena en expectativa, y el entorpecimiento en la investigación ya que hay testimonios pendientes. También explicó que aún resta realizar la reconstrucción de los hechos.

Por su parte, la defensa del sargento —a cargo del Dr. Sergio Brandán— solicitó la excarcelación de su cliente entendiendo que no existen tales riesgos procesales ya que todas las evidencias que faltan incorporar a la causa son pruebas científicas en las que su cliente no puede intervenir.

Además explicó que tiene arraigo en la provincia ya que tiene cuatro hijos a su cargo, tiene 18 años de servicio en la fuerza. Finalmente el magistrado rechazó el planteo de la Fiscalía e hizo lugar al pedido de la defensa.

Durante la fundamentación de la resolución, el Dr. Ordóñez Ducca manifestó que hasta el momento no hay evidencias alguna que lo haga pensar que existen peligrosos procesales. Además indicó que hasta el momento no existen fundamentos sobre la intención de matar de Cogote.

Según manifestó el juez, un policía que da la voz de alto y realiza un disparo de advertencia no tiene intenciones de matar sino de detener. Explicando que todas las medidas que la Fiscalía espera pueden cumplirse con el sargento estando en libertad.

Pese a ello, el Dr. Ordóñez Ducca le imputó a Cogote estrictas medidas de conducta, entre ellas la prohibición de portar arma de fuego, de acercarse a los familiares de la víctima y a testigos. Además en caso de volver a la fuerza —ya que ahora se encuentra en disponibilidad preventiva— solo debe realizar tareas pasivas.