Coleoni volvió al Terrera: "Me emocioné hasta las lágrimas"

El estadio Alfredo Terrera cobijó ayer a uno de sus hijos pródigos. Gustavo Coleoni, el entrenador más ganador de la historia de Central Córdoba, volvió a su casa, esta vez dirigiendo a San Miguel. El "Sapo" está de vuelta en Santiago para enfrentar hoy a Güemes, por la Primera Nacional, pero ayer no pudo contener las lágrimas al volver a pisar el césped del estadio del barrio Oeste.

"Cuando les pedí la cancha a los dirigentes y me dijeron que sí, entré a pensar en ese momento en que suba la escalera y salga. Y la verdad que no pensé sentir esa sensación. Fue una emoción muy linda, entré a mirar las tribunas y a acordarme de cosas, buenas y malas. Fue algo muy lindo, no esperaba que se me despierten tantas cosas adentro, me emocioné hasta las lágrimas. Se lo conté a uno de mis ayudantes y me dijo: 'Sí Sapo, llora tranquilo'", contó el cordobés con los ojos vidriosos y la voz resquebrajada, cuando recibió a EL LIBERAL en el hotel donde se aloja la delegación bonaerense.

El "Sapo" continuó relatando aquel momento inolvidable de ayer al mediodía. "No había nadie. El canchero me abrió la puerta y entré, subí las escaleras y entré a caminarla a la cancha, entré a acordarme de cosas. Me paré en el banco, miraba las tribunas y las plateas… fueron los mejores momentos de mi carrera y de la historia de Central", manifestó mientras otra vez lo embargaba la emoción.

El de ayer fue un día con muchas emociones para Coleoni. "Después vino gente a saludarme, comimos una picada con algunos dirigentes en la secretaría y hablamos un poco. Me ha hecho muy bien venir acá", siguió.

Y agregó: "Tengo un montón de regalos que me dieron los hinchas, recibí muchos mensajes, vino mucha gente al hotel a saludarme. El amor es mutuo y está intacto por suerte".

Presente

La charla siguió con San Miguel, el equipo que ascendió de la B Metro a la Primera Nacional. Y ahora busca llevarlo a Primera (está en puestos de Reducido). "Tiene ciertas similitudes con Central porque acaba de cumplir cien años y nosotros ascendimos en el año del centenario. Con San Miguel recién ascendimos y estamos peleando por entrar al Reducido. Si lo conseguimos, yo ya me conozco, vamos a ser duros. Pero no hay que adelantarse, faltan seis finales todavía", comentó.

"Fue una locura venir a San Miguel. Vinimos para salvarlos y no descender a la C. Lo logramos y pude armar mi equipo con el que ascendimos y ahora estamos peleando y somos sorpresa para todos. Es un equipo humilde que va a dar pelea", añadió.

Coleoni sabe que el partido de hoy ante Güemes será duro: "De los últimos nueve de local creo que ganó ocho. Vázquez lo ha ordenado y lo ha hecho muy competitivo. El otro día con Ferro hizo un buen partido, con mucho amor propio. Hay mucho compromiso de los jugadores de Güemes con la causa".

"Y de local se nota que va para adelante, mete mucha gente en ataque y empuja. Si vos no estás ordenado, se complica. Pero tenemos lo nuestro y somos un equipo duro, vamos a esperar nuestras posibilidades. Vamos a respetarlo a Güemes, pero sabiendo de nuestras fortalezas", cerró.