Piden absolución para 3 policías y cadete, en homicidio de "Chuna"

La defensa de los hermanos David Enrique y Diego Sebastián Arévalo solicitó ayer a la tarde sendas absoluciones, en la etapa decisiva del juicio por el presunto "homicidio" de Roque del Jesús "Chuna" Barraza, la madrugada del 31 de julio de 2022 en el Bº Siglo XXI.

David Enrique Arévalo enfrenta cargos por "homicidio agravado". A su vez, Diego Sebastián Arévalo, por "homicidio agravado en grado de partícipe necesario por inducción", según criterio de la fiscal, Celia Mussi.

Al alegar, primero Diego Lindow (las otras abogadas son, Valentina Bravo Colomer y Josefina Arges) pidió la absolución para el cadete, Diego Sebastián, al sostener "que no ha quedado acreditado que haya inducido a su hermano a tomar su pistola reglamentaria y repeler una agresión externa, a cargo de una decena de adolescentes". Profundizó: "A todas luces", juzgó el letrado, "mi representado no lanzó palabra alguna en el proceder de David Enrique".

Luego, Lindow también requirió la absolución para David Enrique, funcionario policial. Sin embargo, destinó más amplitud de conceptos, ya que de su mano partió el disparo que mató a "Chuna". Señaló que el joven se defendió del ataque de la patota y que solo protegió su propiedad y que previamente recibió amenazas.

Ahondó que se hizo todo lo posible para que la turba desistiera de su agresión: dos policías salieron a instarlos a retirarse; no pudieron; después, uno de los hermanos hizo disparos con un rifle de aire comprimido: finalmente, el policía recurrió a la pistola 9 mm. En síntesis, apostó fuerte sus fichas a una "legítima defensa"; plan B, "un exceso en legítima defensa", o plan C, "la menor (8 años) por un homicidio simple".

En la instancia decisiva, los abogados Lucas Vieyra y Rodolfo Cuestas reclamaron la "absolución" del policía, Hugo Ariel Coiman y los letrados, Guillermo Tuma y Gonzalo Lagar, lo mismo para el policía, Fernando Herrera, imputados por "encubrimiento".