Por lo que deben recibir ayuda de los hijos u otros familiares para poder subsistir.
Bajo el gobierno de Milei, se registraron 5 millones de jubilados pobres e indigentes Bajo el gobierno de Milei, se registraron 5 millones de jubilados pobres e indigentes
Javier Milei volvió despotricar contra la actualización de las jubilaciones y las pensiones que el Congreso convirtió en ley y reiteró que vetará esa norma en su totalidad, al asegurar que en la actualidad los pasivos "ganan más" que cuando su gobierno asumió.
"Lo que ha intentado hacer el Congreso es romper el programa económico. Primero porque mienten, son basuras deshonestas intelectualmente", dijo, afirmando que "hoy los jubilados ganan más que cuando nosotros asumimos, en términos reales, por encima de la inflación".
También te puede interesar:
En declaraciones radiales, el Presidente enfatizó sus dichos del viernes último, cuando en el acto por el aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario, había asegurado que "las jubilaciones subieron en términos reales en un 5%; es decir, le ganaron a la inflación".
Más de 5 millones de jubilados son pobres o indigentes
Sin embargo, desde la Defensoría de la Tercera Edad estiman que son más de 5 millones los jubilados y pensionados que se encuentran bajo la línea de pobreza, por lo que deben recibir ayuda de los hijos u otros familiares para poder susbsistir.
De acuerdo a esas estimaciones, la canasta básica de un jubilado rondaría los $800.000 mensuales, mientras que la jubilación mínima en agosto es de $225.497,54. Aun con el bono de $70.000, que eleva el ingreso a $295.000, esta cifra está muy por debajo de lo necesario para cubrir los gastos básicos.
A esos 5 millones se suman 500.000 personas que cobran la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), que equivale al 80% de la jubilación mínima, y 1 millón de personas con pensiones no contributivas que perciben solo $220.000 mensuales, lo que agrava aún más su situación.
Entre el 80% y el 90% de los adultos mayores son hipertensos o tienen problemas de colesterol, pero la insuficiencia de sus haberes les impide acceder a alimentos adecuados para mantener su salud. Además enfrentan dificultades para adquirir medicamentos no gratuitos y pagar servicios básicos como luz, gas y agua.
