Mauricio Díaz murió ayer, pese al esfuerzo de los médicos por salvarlo. Su verdugo, Fernando Matías Cruz(33). La mujer, María Elizabeth Díaz (41).
Secuestró a su novia para ocultar hematomas de una golpiza y asesinó al hijo, que intentó liberarla Secuestró a su novia para ocultar hematomas de una golpiza y asesinó al hijo, que intentó liberarla
Un adolescente de 18 años falleció ayer a la madrugada en el Hospital Regional, 24 horas después de ser apuñalado por el novio de su madre, en una sangrienta pelea en la vereda de una casa, en el Bº Reconquista.
La tragedia segó la vida de Mauricio Díaz, de 18 años, con residencia en el Bº La Católica. El acusado es Fernando Matías Cruz, de 33, pareja de María Elizabeth Díaz, 41, madre de Díaz.
De la investigación de la fiscal, Fernanda Vittar, se desprende que María mantenía una relación afectiva con Cruz de más de un año. Pese a que la mujer jamás formalizó denuncia alguna por violencia, ahora trascendió que eran habituales las discusiones, cuyas secuelas terminaban con ella desfigurada a golpes.
Mauricio siempre le sugería a su progenitora terminar esa relación, convencido de que no la conduciría a buen puerto.
Y el presagio se hizo realidad, pero con sangre. El domingo 11 de agosto, Cruz atacó a trompadas a María. Cero sensatez, le ordenó acompañarlo hasta casa de un familiar en calle Ceferino Namuncurá, en el Bº Reconquista. La mujer se llevó a la hija más pequeña de 5 años fruto de otra relación.
Allí, la encerró, la despojó de su celular y la instaló junto a la niña de 5 años. María fue penada a no comunicarse con su hijo u otro pariente, bajo amenaza de terminar peor, "fracturada o en camilla", según la advertencia de Cruz.
Pero Mauricio no estaba dispuesto a abandonar a su madre a su suerte. Entre domingo y el jueves, destinó sus energías y recursos para buscar a su madre. Una amiga le proveyó una dirección de la casa de Cruz y finalmente ayer a las dos de la madrugada pudo dar con la vivienda.
Intuía que su madre era mantenida privada de su libertad, porque nunca apagaba su celular y esta vez si la había hecho. Cruz la habría apartado del mundo externo, hasta tanto cedieran los hematomas y escoriaciones en su cuerpo por la última golpiza, precisaron las fuentes policiales.
Mauricio golpeó a la puerta y Cruz lo atendió. Brevemente, permitió que el joven hablase con María, quien no pudo disimular que su rostro era la estampa viviente de un calvario y cruda violencia.
Entonces se produjo lo inevitable. Los testigos indicaron que estalló una pelea entre los dos hombres. En un momento, Cruz asestó dos puñaladas a Mauricio. El jovencito salió la casa, caminó una cuadra y media y cayó herido. Quedó tendido en un charco de sangre. Después arribaron familiares y quisieron atacar a Cruz, también herido en un brazo y glúteo.
Dos fiscales empujan contra las cuerdas a Fernando Cruz
Recién antenoche, María denunció violencia de género. Con su hijo en una sala de la Morgue del Hospital Regional, la mujer habría firmado una presentación y desgranado sus días junto a Cruz.
En esencia, habría manifestado que desde hace un año era golpeada y que no lo denunciaba porque él la amenazaba con matar a sus otros hijos, confió una alta fuente.
Por lógica, Cruz es investigado ahora por dos fiscales. Vittar, en lo atinente al homicidio. A su vez, el fiscal Diego Cortez dará los primeros pasos mañana para imputarlo por "violencia de género" en perjuicio de María. El escenario, muy cuesta arriba para Cruz, enfatizaron las fuentes al cierre de esta edición.
Operación y fallecimiento por mortal puñalada en el corazón
Veinte minutos después del enfrentamiento, Cruz y Díaz fueron socorridos y llevados a Urgencias del Hospital Regional.
Los enfermeros confiaron que el cuadro desesperante, por las puñaladas, era el de Díaz. Los cirujanos resolvieron ingresarlo rápido a quirófano, ya que urgía contener la hemorragia, externa e interna.
Pese a los esfuerzos médicos, el adolescente dejó de existir a la madrugada. Aún se ignoran los detalles específicos de la autopsia, pero se supo que las heridas dieron de lleno en el corazón. Su deceso se produjo por un paro cardiorrespiratorio y desangrado.
Medidas de Vittar
Ni bien fue informada del triste desenlace, la fiscal Vittar solicitó la autopsia y que un grupo de policías, de la División Homicidios y Delitos Complejos, trabaje en el secuestro de los elementos primordiales de la causa.
Desde ayer a la madrugada, Cruz permanece aprehendido por "homicidio" y "violencia de género". Un policía lo custodia en la entrada de la sala. Se encuentra internado, pero "fuera de peligro", confiaron las fuentes hospitalarias. Una vez que los médicos le otorguen el alta, será alojado en un organismo policial.