Las escuelas de todo el país hoy no tendrán actividades. Los docentes festejan su día y reflexionan sobre el rol que desempeñan en la sociedad. Fecha patria en memoria de Domingo Faustino Sarmiento, "el padre del aula".
El desafío de ser docente en contexto de constantes retos didácticos y emocionales El desafío de ser docente en contexto de constantes retos didácticos y emocionales
Hoy, como cada 11 de septiembre, se celebra en nuestro país el Día del Maestro, que es en memoria de Domingo Faustino Sarmiento, a quien se conoce como "el padre del aula", y una fecha que se hace propicia para reflexionar sobre el rol de los educadores en un contexto profesional y social que los expone a constantes desafíos, no sólo didácticos, sino también emocionales.
Hoy sienten la necesidad de revalorizar la figura del maestro, cuya función va más allá del pizarrón, trasciende el aula y se cruza al seno familiar, al contexto social, en un enfrentamiento que no es reconocido ni respetado.
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Carolina Pizzi es maestra del Nivel Inicial desde hace 23 años, y quiere que "la docencia se ponga de moda", pues entiende que "es la única manera de lograr la atención", aunque admite que "este desafío depende mucho de ser docente por vocación, no por trabajar de docente".
No le gusta que se hable mal de la docencia, por lo que su desafío profesional es "a diario seguir intentando y no bajar los brazos, a que se mire nuevamente la importancia de que los niños, grandes y adultos logren internalizar que un docente con vocación, que siente y establece un nexo entre el pensar y el hacer; que entra a la cancha dando todo, poniendo el cuerpo, no solo trasmite conocimientos sino que incluye combos de afecto, valores, hábitos y contención".
Y se pregunta: ¿el desafío es nuestro o es de una sociedad que no puede mirar la necesidad de revalorizar el rol docente? Sea cual fuere la respuesta siento la necesidad de ser ejemplo de lo que busco en otros también. Ser referente, estar frente a alumnos implica ser conscientes de que somos observados y que nuestras acciones pueden ser imitadas, por eso hay que dar lo mejor".
Karina Mariel Hernández es licenciada en Educación primaria y en gestión educativa, se desempeña como directora de la Escuela Nº 972 "Prof. Juan O Gauna" de la ciudad de Forres, y asegura que a lo largo de los años fue "conociendo las maneras, las prácticas, el pensar y el sentir de lo que pasa hacia dentro de la institución, las creencias y todo lo que sostiene el hecho educativo".
"Hoy hablo con la convicción de que si tendría que volver a estudiar, volvería a ser maestra", asegura.
Considera que "la escuela de hoy no es la misma, por lo que el maestro no es el mismo, los niños no son los mismos, la familia ni la sociedad tampoco. Hoy toda la problemática social, la crisis de valores, convergen en la escuela que se ve atravesada por múltiples necesidades que van más allá de lo pedagógico. Los modos de enseñar y aprender han cambiado, algunos nos preparamos para esos cambios, otros simplemente son portadores".
"Creo también que hoy más que nunca debemos poner en valor la educación, el sistema educativo, desde los profesorados y trabajar el planteo de que si realmente estamos preparando profesionales con todas las herramientas necesarias para enfrentar los cambios educativos que ya están y los que se vienen", confiesa.
La relación docente-familia es algo que también tiene hoy nuevos paradigmas. Para Carolina, "en los últimos años es una característica muy común la falta de respeto, culpar de todo lo malo que sucede en la casa a la escuela. Los padres no se hacen cargo de la falta de límites en los niños; de la falta de comunicación en las familias; de las faltas de afecto y contención".
Karina opina en la misma línea que "hoy hay una necesidad de recurrir al otro, una necesidad de escucha, y de sostén. Los padres llegan a la escuela buscando muchas veces contención, y que la escuela les ayude cómo o de qué manera deben manejarse con sus hijos. Hay una crisis de autoridad. Se nota un cambio de roles donde los hijos se transformaron en padres y los padres en hijos. En muchos casos, padres jóvenes que les cuesta ejercer la paternidad".
Ambas sienten que esa falta de reconocimiento que viene desde el hogar, es una carga más a la mochila que cargan los maestros.