Balearon la casa de los padres del procurador que denunció a los líderes de Peta

El caso de la estafa piramidal de Peta escaló ayer a un nivel de suma preocupación cuando dos individuos realizaron ocho disparos con una pistola 9 mm a la casa, en La Banda, de los padres del procurador Fabio Cisneros, uno de los denunciantes sobre múltiples estafas en la plataforma.

"Los disparos fueron realizados por dos sujetos que descendieron de una moto. Uno abrió fuego y una bala pasó rozando a mi madre", señaló a EL LIBERAL, Cisneros quien junto con su esposa, la abogada Ana Gutiérrez, representan a numerosos damnificados y atribuyen a los "líderes supremos" que casi 80.000 santiagueños hayan sido perjudicados en la plataforma piramidal que dejó un tendal de personas sin sus ahorros. Cisneros nombró tres apellidos, Amado, Pinto y Carabajal.

"Desde el lunes que pido seguridad. Uno de los líderes supremos me amenazó. A vos te voy a matar", me dijo. Es un comerciante bandeño", ahondó. "Cinco días después, dos motociclistas hicieron ocho tiros a la casa de mis padres, en Bº 9 de Julio. Estaban solos mis padres. Siempre andan mis hijos, o sobrinos. Tres tiros dieron de lleno en una pared, otro cerca de un auto y otros junto a la puerta", detalló.

Tras la balacera, Cisneros arribó a la vivienda, al igual que policías de la Seccional 47 y sus pares de División Criminalística. La causa es de la fiscal Cecilia Guido, quien ordenó custodia permanente. "Mis padres no tienen dónde ir, o vivir que no sea su casa. Nos guste, o no, ellos van a quedarse. Aquí tienen su mundo y no es posible que recaigan sobre ellos secuelas de gente identificada por estafar a miles de santiagueños", profundizó.

Esta madrugada, los especialistas efectuaban pericias. Asimismo, declaraban vecinos, un tanto preocupados, ya que el inmueble se sitúa a mitad de cuadra, rodeado de otras casas, con familias y niños en su conformación. Una vez que las pericias terminasen y secuestrasen los proyectiles, Cisneros proyectaba conducirse a la sede de la 47 para formalizar la denuncia, al igual que el lunes ante la fiscal, Cecilia Guido.

La funcionaria habría facultado a los policías a solicitar videos desde las cámaras de seguridad de casas y comercios vecinos a la vivienda, blanco de los disparos. Confía en identificar a los responsables.

Un caso que se vuelve peligroso

Mientras el número de damnificados asciende notablemente, más peligroso se vuelve el caso de las supuestas en Peta. Cuando se conoció que la plataforma en lugar de ser una "fuente de inversión" era una estafa piramidal, se contabilizó que los santiagueños damnificados eran alrededor de 58.000. Muchos de ellos perdieron parte de su capital, otros quedaron en la nada misma.

Ahora, allegados a la investigación indicaron que el número de estafados ronda en los 80.000. Varios de los cuales se encuentran en situaciones límites. Todo es impredecible hasta el momento ya que nada garantiza que las victimas puedan recuperar el dinero, pero lo cierto es que el nivel de descontento, escraches y represalias está comenzado a escalar de manera peligrosa.