Las víctimas tienen 14, 15 y 17 años. Los jóvenes se pelearon con el uso de armas de fuego caseras. Fueron derivados a otros centros de salud a raíz de las lesiones: uno de ellos tendría una fractura en la frente que podría comprometer la visión.
Tres menores heridos en un duro enfrentamiento entre dos grupos y con varios policías lesionados Tres menores heridos en un duro enfrentamiento entre dos grupos y con varios policías lesionados
Un enfrentamiento entre adolescentes que tienen diferencias de vieja data terminó en una batalla campal en contra de la policía, que intentaba separarlos. Hubo disparos con "tumberas" de un lado y balas de goma, del otro. El saldo fue menores y policías heridos.
El hecho se registró cerca de las 14.45 de ayer, cuando personal de la Departamental 17 fue alertado de que en la Manzana 29 del barrio Belén había incidentes de grandes dimensiones con menores armados con machetes y armas de fuego.
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Rápidamente los uniformados llegaron al lugar. Un grupo de jóvenes —apodados "Los Ñeris"— lideraban la gresca y al ver a los uniformados comenzaron a amenazarlos verbalmente. En ese momento, los efectivos se entrevistaron con una mujer que informó que los acusados estaban agrediéndose físicamente con otro grupo de jóvenes.
Los revoltosos al ver a la mujer conversar con la policía, comenzaron a arrojar ladrillos en dirección a su casa y hacia los uniformados, realizando disparos con arma de fuego de fabricación casera, según consta en el informe policial.
Ante este ataque, los policías respondieron la agresión haciendo disparos de balas de goma al aire para poder dispersar a los violentos y así poder replegarse a una zona segura. La policía informó que durante las agresiones, el cabo Pablo Batule y el agente Gastón Cejas, resultaron heridos.
Como consecuencias del ataque de los revoltosos, una patrulla policial fue seriamente dañada. Autoridades policiales de distintas dependencias se hicieron presentes y trabajaron en el lugar junto con peritos de Criminalística. Mientras la policía realizaba los trabajos de rigor, tres menores ingresaron de urgencia —acompañados por sus madres— al Hospital Neumonológico "Dr. Gumersindo Sayago" con graves heridas de bala.
Los médicos que lo asistieron indicaron que los menores Oscar (17) y su hermano Jonathan (15) —ambos del Bº Bosco III— tenía heridas de bala en sus espaldas y uno de ellos tenía una lesión ósea en la frente. Mientras que una menor —de 14 años, de apellido Salvatierra, del Bº Belén— también presentaba balazos en piernas, manos y espalda, y debía ser asistida por un cirujano por lo que fue trasladada al Regional.
Según se supo uno de los adolescentes tenía una supuesta fractura en su frente la cual podría complicar la vista por lo que fue derivado a otro centro de salud. Personal de la Comisaría 4ª se hizo cargo de este procedimiento por jurisdicción.
El Dr. Nicolás Heredia —fiscal de la Unidad de Violencia Institucional—ordenó medidas en el lugar del hecho y que los menores sean examinados por el médico de Sanidad.
Le "abrieron" la cabeza con un ladrillo durante un partido
En el barrio Mariano Moreno también hubo un incidente durante un encuentro deportivo. Según informó la policía, allí la víctima fue un adolescente de 16 años, quien recibió el impacto de un ladrillo en la cabeza.
Ocurrió cerca de las 22 del lunes, en calle Narciso Gómez y Pasaje 587 cuando la víctima se encontraba jugando a la pelota con otros menores y un grupo de adolescentes llegó al lugar para "tirar la bronca y les robaron la pelota".
Según denunció la mamá de la víctima, ante una lluvia de piedras su hijo terminó con un corte en el cuero cabelludo. La víctima fue asistida en el Regional donde recibió asistencia. La médica de Sanidad le diagnosticó 21 días de curación.
J. Díaz de Solís: jóvenes se atacaron con piedras
Otro violento episodio se registró cerca de las 16, en inmediaciones de calles Vasco Núñez y Capitán Mejía del barrio Juan Díaz de Solís, cuando al menos cuarenta personas se dieron cita en una cancha de fútbol de la zona para agredirse.
Personal de la Comisaría 11 tomó conocimiento a través de los vecinos que deportistas que compartían un encuentro de fútbol se "desconocieron" y comenzaron a agredirse arrojándose ladrillos.
Cuando los efectivos junto con sus pares de la División Prevención de la Departamental 16 arribaron al lugar, lo revoltosos comenzaron a huir por distintos sectores del barrio.
Los uniformados permanecieron en la zona algunos minutos hasta que se retiraron todos, para evitar así nuevos enfrentamientos.
Según se supo, en este incidente por fortuna no se registraron personas heridas hasta el momento.
