"El cordobés", ese tren que unía a numerosos pueblos santiagueños

La Banda es una ciudad históricamente ferroviaria. Eso lo sabemos cada uno de los nacidos en esta comarca embrujada de poesía y canto.

El tren le dio a la "Cuna de Poetas y Cantores" el empuje necesario para que retome el camino de los buenos tiempos y se consagre como la ciudad más importante del departamento Banda.

El 21 de noviembre de 1932, según datos de distintos historiadores, se inaugura el ramal La Banda/Córdoba del Ferrocarril ya llamado Mitre por ese año. Este unía muchas localidades del sur santiagueño como Robles, Brea Pozo, Atamishqui, Medellín, Chilca Juliana, Los Telares, Ramírez de Velazco, Sumampa, Sol de Julio y así llegaba a la provincia de Córdoba. El tren de pasajeros que realizaba ese camino popularmente era conocido como "El cordobés".

Siendo yo un niño junto a mi abuela y mi madre algunas noches de la semana nos trasladábamos a la estación de trenes de nuestra ciudad para esperar "El cordobés".

Dentro del pasaje llegaban muchas mujeres con canastos y cajas (desde los distintos parajes por donde el tren pasaba) colmados de carne de cabritos, guasunchas, vizcachas, carne de vaca, también la exquisita chanfaina, quesos de cabra, quesillo y otros manjares de la comida tradicional. La gran mayoría de la gente de La Banda se acercaba para adquirir todos esos productos a muy buenos precios.

Algunas veces estas mujeres solían trasladarse al recordado "mercadito sud" en Irigoyen y Avellaneda (hoy allí se encuentra en Honorable Consejo Deliberante de nuestra ciudad) allí ofrecían sus productos.

También muchas de esas santiagueñas vendedoras de "El cordobés" esperaban la mañana y salían por las casas de familias del centro bandeño a ofrecer sus productos.

Sin duda es un paisaje inolvidable.

Esa formación ferroviaria existió por aquellos años y hoy vive en el recuerdo, en la historia de nuestra ciudad.

Indudablemente es un escenario de antaño que vivirá por siempre en la memoria de nuestro pueblo.

Cientos de poetas le dedicaron su creación a este signo inequívoco de la identidad bandeña. Miles de cantores le dedicaron su arte al ferrocarril, a los personajes que habitaron la vieja estación de trenes y a los lugares por donde este medio de transporte popular ha circulado por La Banda.

Actores bandeños también realizaron diversas representaciones sobre lo que fue el apogeo del tren en esta ciudad.

El arte, disparador de reflexiones y también sanador, visibilizó siempre la importancia del tren y lo hizo a través de una dramaturgia en la que la nostalgia siempre domina.

El tren, para los bandeños, es identidad, vida y razón de ser.