También se pidió su pronta beatificación, al conmemorarse 30 años del fallecimiento del primer obispo.
Inicio de las actividades centrales para recordar a monseñor Jorge Gottau Inicio de las actividades centrales para recordar a monseñor Jorge Gottau
AÑATUYA, Taboada (C). En el marco del 30º aniversario del fallecimiento de monseñor Jorge Gottau, en las comunidades diocesanas se rezó para recordar al religioso que fue el primer obispo añatuyense y también para pedir por su pronta beatificación.
En horas tempranas, ayer comenzaron a arribar delegaciones de colegios diocesanos que fueron recibidas en el Colegio San Alfonso por las autoridades y el obispo actual, monseñor José Luis Corral. Hubo jornada de animación y de oración y, al cierre de esta edición, se concretaba la exposición de la obra de Gottau y una vigilia artística.
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Hoy, desde las 9, será la marcha de procesión desde la entrada de la ciudad hasta la parroquia de la Catedral, donde se oficiará la santa misa.
"Con este encuentro queremos recordar con memoria agradecida los 30 años del fallecimiento de monseñor Jorge Gottau. Recordar todas las obras que nos dejó, el legado importante en lo material y espiritual, y entre ellos este fruto que es la educación por lo que tanto luchó y aportó", manifestó el obispo Corral.
Participan delegaciones de Campo Gallo, Tintina, Añatuya, Bandera Bajada, Quimilí, Monte Quemado, Bandera, Pampa de los Guanacos San José de Boquerón, Tacañitas, Los Juríes y el Instituto Monseñor Jorge Gottau de ciudad Capital.
Quién fue Gottau
Jorge Gottau nació en la localidad bonaerense de Esteban Gascón, el 23 de mayo de 1917. A los 12 años, ingresó en el seminario menor de los Padres Redentoristas, en Bella Vista. El 19 de octubre de 1942, fue ordenado sacerdote. En 1961, la Santa Sede creó varias diócesis en el país, entre ellas la de Añatuya. El papa Juan XXIII eligió a monseñor Jorge Gottau para que fuera su primer obispo. Se hizo cargo el 1 de octubre.
Al asumir, la Diócesis tenía 7 parroquias y 7 sacerdotes para atender a 120.000 habitantes desperdigados en 68.000 km2. Durante 31 años, monseñor Gottau creó 15 nuevas parroquias y más de 200 capillas, con la colaboración de 30 sacerdotes, 150 religiosas y gran cantidad de religiosos y laicos.
También creó 26 centros educativos primarios, secundarios, terciarios, agrotécnicos, de capacitación laboral, talleres y una escuela de educación especial, entre otros. Además, se crearon siete hogares, y el Obispado promovió cooperativas y el denominado "Proyecto del Salado".
