Es una hermosa oportunidad de comunión eclesial para agradecer el don de la vocación recibida, expresó.
Sacerdotes de la Diócesis de Añatuya se reunieron en la Misa Crismal Sacerdotes de la Diócesis de Añatuya se reunieron en la Misa Crismal
AÑATUYA, Taboada (C). Como todos los años, la parroquia Virgen del Valle de Añatuya fue el escenario de la Misa Crismal, que reúne a todos los sacerdotes de la Diócesis para la renovación de sus votos.
En su homilía, el obispo de la Diócesis de Añatuya, monseñor José Luis Corral, manifestó: "Esta ocasión de la Misa Crismal es una hermosa oportunidad de comunión eclesial para agradecer el don de la vocación recibida, la misión confiada, la entrega cotidiana de cada uno de los sacerdotes de nuestra Diócesis, por los que estuvieron y los que están, para reenamorarnos de este don".
También te puede interesar:
"Muchas veces es común decir 'es lo que hay' y desde una mirada de fe deberíamos decir: 'estamos en lo que Dios quiso. Es lo que hay' es una expresión que se dice cuando uno tiene que conformarse con lo que hay en ese momento porque no queda más remedio que aceptarlo. Pero hoy recordamos que es el Señor quién nos escogió y llamó".
"Él mismo nos asegura: No me eligieron ustedes a mí, sino que yo los elegí y los destiné para que vayan y den fruto y su fruto permanezca", dijo el obispo citando al Evangelio.
Prosiguió: "Queridos hermanos y hermanas, estamos ante la obra divina, no sólo con un hecho meramente temporal y terrenal, que se agota en una existencia en un pedazo de espacio del universo y en un lapso de la historia, sino que está imbuida y atravesada de eternidad. Somos la 'respuesta' a la oración incesante de muchos en la Iglesia que piden al dueño de los campos que envíe obreros a su mies. Somos también 'respuesta' al sacrificio de tantos fieles que, unidos a Cristo crucificado, han ofrecido y ofrecen en favor de nuestra fidelidad y perseverancia el peso de sus enfermedades y límites, las privaciones voluntarias o la aceptación de circunstancias adversas que les tocan vivir".
"Queridos hermanos sacerdotes, sí, Dios la inició en ustedes y quiere acompañarla hasta su plenitud. Nos unimos a cuantos han aceptado la llamada al sacerdocio ordenado y se dedican al anuncio del Evangelio y parten su vida, junto al Pan Eucarístico, por sus hermanos, sembrando esperanza y mostrando a todos la belleza del Reino de Dios. Hoy nos vestimos de fiesta porque Dios renueva su alianza con nosotros y por medio nuestro con todo el santo pueblo de Dios", finalizó el obispo Corral.