Vacaciones no es sinónimo de irse a otro lugar, sino que tiene que ver también con saber cortar con la actividad del trabajo en el lugar en que uno está".
El no poder salir de vacaciones plantea una serie de frustraciones difíciles de manejar El no poder salir de vacaciones plantea una serie de frustraciones difíciles de manejar
Por estos días, no son pocas las personas que se ven imposibilitadas de salir de vacaciones a otros lugares, debido básicamente a la difícil situación económica que atraviesa el país, y afrontan un estado emocional que puede llegar a ser muy frustrante y llevar a estados emocionales complicados, si no se hace un replanteo de la situación y se la analiza desde otro punto de vista.
La licenciada Emily Azar, psicóloga, advierte que es fundamental entender que las vacaciones no sólo implican irse a otro lugar, sino que deben servir para eliminar las tensiones del año laboral.
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"El no haber podido salir de vacaciones genera una frustración, y la frustración en sí genera ciertas emociones consecuentes a la percepción de no haber logrado el deseo, o el plan, que puede ser tristeza, ira y ansiedad, que son los más frecuentes", admite la profesional.
Al mismo tiempo, advierte que "el no haber logrado el plan, lleva a que la persona se quede estancada, con una percepción negativa de sí misma, o bien que aparezca una activación de la creatividad, cuando se dé cuenta de que el disfrute no pasa en sí por un solo lugar o por una cuestión especial".
"Hay que tener en cuenta qué tipo de vacaciones uno quería tomarse, si eran familiares, románticas, de trabajo, o lo que está hoy muy de moda que es vacaciones y trabajo en conjunto, y según cuál haya sido el plan o el propósito de esas vacaciones, va a ser la percepción que se tenga", añadió.
Por otro lado, dijo que hay una cuestión que tiene que ver con la readaptación antes de las vacaciones, "que es el hecho de entender que hay muchas actividades culturales que se ofrecen para poder atravesar esta etapa; que vacaciones no es sinónimo de irse a un determinado lugar, sino que tiene que ver también con saber cortar con el trabajo en el lugar en que uno está".
"Existen traumas por vacaciones. Hay estrés prevacacional, que es cuando se pone uno en qué preparo, qué dejo, qué termino, cómo voy con cada cosa, y el posvacacional, que es cuando estando de vacaciones no se han podido desconectar, y han ocurrido cuestiones que hacen que al volver, la sensación sea de no haber descansado, de haberse agotado, de haberse generado más ansiedad, porque se acaba el tiempo de vacaciones", amplió.
La estrategia de planificar unas futuras escapadas
Otros especialistas sostienen que aunque no podamos irnos de vacaciones en el momento actual, resulta de gran ayuda programar unas vacaciones que nos permitan relajarnos y disfrutar, para dentro de unas semanas o meses.
"Concretar el momento en el que podremos irnos de vacaciones en una fecha futura, nos permitirá tener una referencia temporal de la meta a la que tarde o temprano llegaremos, y que nos servirá como elemento motivador", sostienen.
En tiempo de vacaciones se celebran actividades culturales relacionadas con la música o el cine al aire libre, que se pueden vivir de manera intensa una vez finalizada nuestra jornada de trabajo diaria incluso aunque nosotros no tengamos esos días libres.
