Sensación de falta de aire: cómo resguardar la salud del calor y la humedad de estos días

Los efectos de las altas temperaturas se hacen sentir en la provincia. El organismo reacciona de distintas formas a la intensidad del calor, y en este verano se volvió más común de lo habitual escuchar a la gente hablar de la "sensación de falta de aire". Los especialistas lo relaciona casi directamente con los elevados porcentajes de humedad que se registra en el ambiente, lo que podría contribuir a pronunciados malestares de la salud.

Por ello resulta primordial estar pendientes a "síntomas extraños", realizar controles médicos, y resguardarse de las altas temperaturas, sobre todo en los horarios de extremo calor.

En ese contexto, el Dr. Luis Orellana, médico cardiólogo, referente de enfermedades crónicas del Ministerio de Salud y docente de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Santiago del Estero, precisó que hoy, más que nunca, se hace necesario escuchar las advertencias de los profesionales de la salud para evitar cualquier descompensación como producto del calor.

"Hay que hacer énfasis en las recomendaciones sobre la exposición al calor, a las temperaturas extremas, sobre todo ahora que hay tanta humedad. Las recomendaciones se basan principalmente en evitar la exposición a estas temperaturas y a evitar la deshidratación. Por ello sugerimos tomar mucha agua durante todo el día, aunque no tengamos sed. También hay que cuidarse con la alimentación, la cual debe ser lo más sana posible. Se debe consumir muchas frutas y verduras", indicó Orellana.

Síntomas

Sensación de falta de aire, transpiración permanente y malestar son algunas de las formas en las que el cuerpo se manifiesta por estos días.

"La mayor parte de estas reacciones tienen que ver, efectivamente, con el calor y la humedad", confirmó el especialista y pidió resguardarse todo lo que sea necesario en estos días de intenso calor.

Los más propensos a sufrir complicaciones

El calor golpea a todos, aunque no por igual. Son los niños, los ancianos y las personas con enfermedades preexistentes quienes pueden padecer las mayores consecuencias.

"Hay que tener especial cuidado, en estos días, con los pacientes que tienen enfermedades cardiovasculares, cardíacas, diabetes, y los enfermos renales crónicos. Ellos, sumado a los adultos mayores, son las personas que tienen mayor riesgo de sufrir descompensaciones ante estas situaciones. Son personas más frágiles que se deshidratan rápido. Además, con el calor y la deshidratación puede bajar mucho la presión y eso traer complicaciones", sostuvo.

Por esta situación en la que se encuentra este grupo de personas es que se hace necesario recurrir al médico ante cualquier malestar relacionado al calor.

Hay que hacer un control y revisar los remedios

Asistir al médico periódicamente debe ser una práctica incorporada, sobre todo en estos tiempos en los que la temperatura suele ser muy agresiva.

Los profesionales de la salud sabrán guiar en los cuidados, especialmente en aquellos que se medican regularmente, más aún durante estos días.

"En estos cambios de estación hay que hacer un control para revisar el tema de los medicamentos, sobre todo en personas que toman diuréticos, medicamentos para la presión arterial, ya que por lo general hay que ajustar de vuelta la dosis de los medicamentos para no tener complicaciones", sugirió el Dr. Luis Orellana.

En ese contexto recomendó a los santiagueños realizarse controles de laboratorio para ver el funcionamiento renal.

Un especial cuidado deben tener en estos días los pacientes diabéticos o con patologías cardíacas diagnosticadas

El calor, con la intensidad con la que se siente en Santiago, es casi imposible que no genere alguna extraña sensación en el organismo de cualquier persona. Sin embargo, el Dr. Luis Orellana hizo una especial advertencia para un grupo de la comunidad: aquel conformado por pacientes diabéticos o con patologías coronarias.

"En este tiempo, los pacientes diabéticos pueden tener síntomas que enmascaran enfermedades coronarias. Por ejemplo, no hacen dolor de pecho, pero sí una sensación de falta de aire, disnea, con transpiración, desasosiego, a veces con náuseas, eructos. A esos síntomas hay que estar atentos siempre. Hay que recordar que los problemas cardiológicos a veces no se manifiestan solamente en el tórax, sino que pueden aparecer dolores en el cuello, mandíbula, en ambos miembros superiores, dolores en la espalda, acompañado con transpiración. Cuando esto sucede, lo primero que se debe hacer es consultar al médico, quien deberá hacerle un electrocardiograma para evitar complicaciones", sugirió.

Consejo

Siempre la salud deberá ser prioridad en todas las personas. Por ello se pide "frenar" cuando se siente que el cuerpo está agotado y realizar controles cuando haya señales de alerta.