Pericias a celulares develarían a los ideólogos del robo de 120 t de soja Pericias a celulares develarían a los ideólogos del robo de 120 t de soja
Los expertos de la policía habrían realizado pericias a los celulares de tres camioneros acusados de piratear soja, por más de $ 2.500.000, y establecido múltiples diálogos con supuestos compradores de aleaginosas provenientes del mercado negro.
Los imputados serían los hermanos Walter Germán y Nelson Fabián Aranda, más Cristian Zabala Bazán, imputados por presunta ‘defraudación calificada’ y ahora ‘asociación ilícita’.
La denuncia fue interpuesta el 29 de enero último en la Seccional N° 29 de Quimilí, Moreno. Fue formalizada por Denis Juan José Galfrascoli, titular de la empresa Logística del Transporte, con residencia en la avenida Rivadavia del B° San José de Calasanz.
La presentación
El empresario denunció el robo superior a $ 2.500.000 con 120.000 kilos de soja desde el campo Flor del Norte, Tintina, Moreno, responsabilidad de las firmas Lipsa y ACA (Asociación Cooperativas Argentinas).
Galfrascoli habría contratado a los tres camioneros, más Sergio Osvaldo Aranda, actualmente prófugo y cuya detención no fue materializada por problemas administrativos propios.
Según el denunciante, contrató a los cuatro camioneros para llevar la soja hacia Santa Fe, pero jamás llegaron a destino y luego personal de la División Homicidios de La Banda develó que la soja fue entregada en campos privados de Malbrán, cuyos responsables serían citados ahora.
Mercado negro
El resto de la soja terminó descargada en una aceitera de la provincia de Córdoba, trascendió.
‘¿Qué esperaban que hiciéramos? Nos pagaban $ 6.000 por cada viaje. Alguien nos habló y ofreció a cada uno casi $ 20.000 por cambiar de destino’, deslizó uno de los camioneros a la comisión policial santiagueña, al apresarlos con orden del juez de Control y Garantías, Darío Alarcón.
Allí radica el quid del proceso para el fiscal Sebastián Robles.
Establecer la identidad del o los individuos que están detrás de las maniobras, ya que excederían a la mera apetencia de los cuatro camioneros.
Los tres presos cruzan los dedos, ya que en la semana que arranca, o la próxima, serían conducidos a los tribunales.
En la ocasión, el fiscal solicitaría prisión preventiva con el agravante de la “asociación ilícita”, delito no excarcelable.
Los compradores abren el paraguas y esperan citaciones
El desfile de abogados por la Fiscalía desnuda el nerviosismo de algunos dueños de campos, en especial de Malbrán, departamento Aguirre.
Allí habría sido descargada parte de la carga: un poco más de $ 500.000 por cada uno de los cuatro camiones.
Casi 50 días después de la denuncia y más de un mes de sus caídas en Santa Fe, los tres camioneros empezaron a reflejar preocupación.
En la práctica, los tres camioneros ya no permanecen aferrados al silencio, a sabiendas que por unos pocos pesos pueden permanecer presos todo el año.
Es el momento ideal para que la Fiscalía reciba sus ampliaciones de indagatorias.
En la primera ocasión, los tres detenidos se habrían mostrado lacónicos, reticentes en responder preguntas básicas y mal conjeturando que en menos de una semana quedarían libres. Los tiempos son otros. Sus celulares han sido retenidos por la policía y los abogados ya no preguntan tanto por ellos.
En los días que vienen, la Fiscalía profundizará la investigación, resuelta en recibir las conclusiones a las pericias telefónicas.
Al fiscal Robles parece obstinar quién o quiénes están detrás del negocio, ya que sospecha que el robo de la soja no fue casual, sino un objetivo más dentro de una jugosa operatoria con siete ceros. l
