Los gobiernos de Trump y Bolsonaro sellan alianza pro Guaidó en la frontera

SAN PABLO, Brasil. Los gobiernos de Estados Unidos y Brasil afirmaron que cumplían un papel "completamente humanitario" con la entrega de alimentos y medicamentos que, en territorio brasileño, dejaron en manos de los aliados de Juan Guaidó, quien se juramentó como presidente interino de Venezuela por encargo de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento).

Lo hicieron en una conferencia de prensa conjunta en Pacaraima, Estado de Roraima, el encargado de negocios de la embajada estadounidense en Brasilia, William Popp; y el canciller brasileño, Ernesto Araújo, acompañados por la representante de Guaidó, María Teresa Belandria.

"La asistencia no termina hoy, hoy es el punto de partida", dijo Popp, al destacar la cooperación del gobierno de Donald Trump y de Jair Bolsonaro en la entrega de 178 toneladas de alimentos y medicamentos.

"Nuestro papel es completamente humanitario. Es a pedido del presidente Guaidó y ahora el régimen debe permitir que esta ayuda pueda llegar al pueblo", dijo Popp.

El canciller brasileño explicó que "puede ser el inicio de la entrega humanitaria y de la apertura democrática en Venezuela" y reiteró que "no hay expectativa de un conflicto armado" en la región fronteriza.

Postura de Evo Morales

"La agresión contra Venezuela obliga a elegir entre la guerra y la paz", dijo el presidente boliviano, Evo Morales, a través de su cuenta de Twitter.

"La agresión que vive Venezuela trasciende las diferencias políticas y nos obliga a tomar una posición: estamos a favor del multilateralismo o del unilateralismo; del derecho internacional o de la barbarie; de la paz o de la guerra", dijo el presidente boliviano, citado por la agencia rusa Sputnik.

Morales calificó a la ayuda humanitaria que la oposición pretende ingresar en Venezuela de un caballo de Troya.

El gobierno venezolano advirtió que cualquier vehículo que ingrese a su territorio sin autorización será considerado como blanco militar y cerró temporalmente tres puentes hacia Colombia y la frontera con Brasil. Rusia, China, Cuba, Bolivia, Irán y Turquía, entre otros países, siguen apoyando al gobierno de Maduro.