Indagan a detenidos por la balacera del barrio Sarmiento

Después de la lluvia de plomos a plena luz del día 30 de diciembre pasado, en vivo y en directo frente al vecindario, la Fiscalía arranca esta semana con la indagatoria a los tres detenidos del B° Sarmiento. Según fuentes policiales, fue un capítulo más en una seguidilla de ataques, desquites, venganza y nuevas ofensivas por el negocio de las drogas, en un perímetro delimitado por las calles Lavalle, Moreno, Suárez y avenida Colón. Los "personajes" presos ya tendrían antecedentes y caídas múltiples, pero sin haber sido juzgados por los delitos reiterados: daños, lesiones, robos, hurtos, atentado y resistencia a la autoridad. Contexto social Pese a que la "zona de guerra" fueron las calles Posadas y Granadero, el Sarmiento destila bronca entre sus adolescentes, sin distinción de nada. Entre los hechos policiales más notorios, se advierte el más insólito, allá por mayo del año 2017. Un joven se suicidó en calle San Luis, entre Lamadrid y calle 7. Sus eternos rivales irrumpieron al frente de la casa y prendieron cohetes, a modo de celebración. Los parientes de la víctima salieron y repelieron los "festejos" a tiros. Los visitantes justificaron su audacia afirmando que meses atrás los "dolientes" hicieron lo propio, con un muerto suyo. Unos y otros lo dirimieron a tiros. Y al llegar la policía, se unieron contra el nuevo "enemigo". Drogas y algo más... En los 90 y el 2000 enfrascados en peleas internas (con cuatro muertes en el medio), hoy a las nuevas generaciones parece seducirlas sólo la droga. El problema se acentúa porque hay "dealers", vendedores y consumidores. Allí radicaba ayer la encrucijada fiscal, sin definir las imputaciones penales. Habría tentativas "lesiones", "daños", "uso de armas" sin resorte legal, sobre las cuales los detenidos miran su futuro con "rayas". Para peor, debuta con ellos la Feria Judicial 2019.