Lo juzgan por asesinar a su esposa de 7 puñaladas convencido de que le era infiel con un cuñado Lo juzgan por asesinar a su esposa de 7 puñaladas convencido de que le era infiel con un cuñado
Un obrajero es juzgado desde ayer, sospechado de matar a su mujer como un animal, literalmente degollándola frente a los hijos.
Se trata de Gustavo Ramón Silva, quien el 26 de julio del 2015 mató a María Esther Loto, furioso por celos hacia uno de los cuñados de la víctima, en El Caburé, Copo.
Según la investigación fiscal, Silvia tenía grandes problemas por violencia, motivo por el cual antes la Justicia supo fijarle restricciones hacia la mujer, de 34 años y madre de 10 niños, entre 3 y 12 años.
Esa jornada, Silva atacó a Loto a trompadas. Luego, tomó un cuchillo y le asestó 7 cortes en el tórax. Después, arrodillándose sobre ella, la degolló.
La autopsia
La autopsia confirmó que tenían de 2 a 3 centímetros de ancho por 10 a 12 de profundidad.
"Estoy muy arrepentido; la maté porque pensé que ella me engañaba con el marido de la hermana", dijo Silva ante el juez José Luis Torrelio y la fiscal érika Leguizamón.
"Ella me trataba mal; me pegaba y vivía denunciándome", señaló Silva en casi 50 minutos de indagatoria, lo cual es considerado lisa y llana excusa.
"Yo sospechaba que había otro en su vida; estaba convencido de que salía con el marido de la hermana", ahondó, al tiempo que reconoció que tenían una relación conflictiva.
Suicidio frustrado
Siempre en función a la historia, al contemplarla muerta en un charco de sangre, Silva intentó suicidarse cortándose en el cuello y en las muñecas.
La tragedia fue presenciada por el hijo mayor.
Justamente los gritos del niño, "¡Papi, no le hagas así!", retumbaron en la tranquilidad de la tarde de la casa.
Entonces, los vecinos asomaron para contemplar qué sucedía y descubrieron a Silva montado sobre Loto, matándola.
Al arribar la policía, Loto yacía sin vida. A su lado, Silva tenía varias heridas cortantes en la garganta y en sus muñecas.
Auxilio
Urgente, lo trasladaron al Hospital Zonal de Los Pirpintos, pero por la gravedad del cuadro lo derivaron al de Roque Sáenz Peña, Chaco.
Después de largas semanas de internación, los médicos le salvaron la vida.
En la víspera, el secretario hizo una síntesis de los cargos de la Fiscalía, que será representada por el doctor álvaro Cantos.
El tribunal está integrado por Graciela Viaña de Avendaño (presidente), María Eugenia Carabajal y Juan Carlos Storniolo.
Los cargos que se le endilgan son gravísimos: "Homicidio calificado por el vínculo en un contexto de violencia de género en concurso ideal".
Dado a las figuras, de ser hallado responsable Silva camina por la cuerda floja, cuya última estación invariablemente será una condena a prisión perpetua.
Hoy, el tribunal arrancará con los testigos presenciales del homicidio.