Evalúan tomar testimonio en el hospital a la mujer quemada

La joven que se prendió fuego a lo bonzo permanecía anoche en terapia intensiva del Hospital Regional. La fiscal del caso solicitó un informe pormenorizado acerca de su real estado de salud y si está en condiciones de prestar declaración testimonial. El marido y el hermano de la joven recibieron las curaciones del caso y les dieron el alta médica. Hoy se deben presentar ambos ante la Fiscalía.

La Dra. Aída Farrán Serlé, fiscal del caso, manifestó en diálogo con EL LIBERAL que Pamela Córdoba de 29 años, continuaba ayer internada en terapia intensiva. La joven sufrió quemaduras en gran parte de su cuerpo, después de haberse rociado con alcohol en el interior de su casa en el paraje Alhuampa, en el interior del departamento Moreno.

La representante del Ministerio Público, adelantó que solicitará un informe detallado a las autoridades del Hospital Regional, respecto del real estado de salud de Córdoba, ya que en un primer momento se deslizó que había sufrido quemaduras en un 80% de su cuerpo, pero las lesiones no serían de tal gravedad.

Lo que busca la fiscal, es determinar si la joven está en condiciones de prestar declaración testimonial. Para la Dra. Aída Farrán Serlé resultaría muy valioso contar cuanto antes con la versión de la mujer, a los fines de aclarar las circunstancias del confuso hecho.

Por su parte, José Lemos -esposo de la joven- y Héctor Córdoba -hermano de la mujer- recibieron el alta médica ayer tras haber recibido las curaciones del caso.

Los dos hombres fueron citados para esta jornada al edificio de la Fiscalía, por lo que deberán presentarse en Yrigoyen y Chaco para dar su testimonio acerca de lo ocurrido en la vivienda de la pareja.

Incidente

La Justicia trata de dilucidar cómo ocurrieron los hechos. Aparentemente Pamela Córdoba se roció con alcohol y se prendió fuego en el interior de su vivienda.

Ante esa situación, su pareja y su hermano, habrían intentado auxiliarla y habría sido allí que resultaron heridos.

Otra versión indica que la mujer arrojó el líquido inflamable sobre su marido y luego sobre ella, supuestamente cansada de los maltratos.

Lo cierto es que habría sido el hermano de la mujer el que logró salvarla al arrojarla a una pileta de calicanto que había en el inmueble.

Los investigadores no descartan ninguna hipótesis por el momento. La fiscal espera poder escuchar la versión de cada uno de los involucrados para luego disponer nuevas medidas.

Mientras era trasladada en ambulancia, la mujer habría deslizado que estaba cansada de los hechos de violencia, pero un informe socioambiental habría arrojado que los vecinos desconocían esa situación.

En el lugar se secuestró una botella con alcohol y se realizaron las pericias correspondientes.